Una familia destrozada por una "oscura" adopción
Una familia destrozada por una "oscura" adopción.
Félix Ángel Huidobro (Morgovejo) y Beatriz Ibán (Prioro) se quedan sin sus dos niños de acogida después de cuidarles con amor, respeto y educación durante más de 4 años.
Cuando el pasado siete de octubre les avisaron de que una familia de adopción se haría cargo de sus dos niños de acogida, no se lo podían creer...
Ellos son Félix Ángel Huidobro (Morgovejo), y Beatriz Ibán (Prioro), que junto con su hija Teresa (10 años) y los dos pequeños (J.M.H. y J.R.H) que acogieron hace 4 años, formaban una familia modelo donde la educación, el amor, el sentimiento y los valores marcaban una vida entre la capital leonesa y los dos pueblos del Alto Cea.
Fue hace poco más de 15 días cuando se llevaron, por sorpresa, la peor noticia posible que rompería la unidad familiar que habían creado. Ese día de octube, la Gerencia Territorial de Servicios Sociales de León les comunicaban que deberían entregar a los dos niños de 5 y 7 años al haber encontrado, de repente, una familia de adopción. El día más triste para ellos llegó finalmente el pasado viernes, 23 de octubre, cuando se despidieron por última vez de ellos, de unos niños que habían estado cuidando como si fueran suyos durante los últimos cuatro años.
Ante la grave situación creada sin esperarlo, estos padres montañeses decidieron acudir al Defensor del Menor del Procurador del Común solicitando la paralización del proceso de adopción, así como la valoración exhaustiva y multidisciplinar de los efectos que dicha adopción pueda tener tanto en los niños como en su hija en aras de determinar y priorizar e! interés superior de los menores con anterioridad a la materialización del proceso de adopción. Por último, desde la familia se busca que se aporte la documentación e informe de las gestiones realizadas para garantizar que el proceso de selección de la familia de adopción se ha llevado a cabo con total transparencia.
Todo comenzó en julio de 2016 cuando ellos asumieron la responsabilidad como padres de acogida del niño J.M.F. Después, el 9 de diciembre del mismo año asumen Ia misma responsabilidad para J.R.F.
Durante todo el tiempo que transcurre la nueva unidad familiar, los pequeños van creciendo tanto física como emocionalmente y la integración en el entorno familiar y social es absoluta.
Fue posteriormente en 2019 cuando se inicia la valoración para la salida en adopción de los niños. En ese momento, tanto Félix como Beatriz advierten a los responsables de que no están de acuerdo con la decisión puesto que, transcurridos 3 años desde que los niños están con ellos, el vínculo y apegos generados es muy fuerte, siendo a todos los efectos una familia estable. En ese momento, instan a los responsabies a tener en cuenta que se ha superado, en más de un año, la duración máxima de la figura de acogedores temporales que rige la situación y se ofrecen, una vez más, para aceptar cualquier medida o decisión que aporte continuidad, seguridad y estabilidad y evite medidas traumáticas y más tensiones a los rnenores.
Desde noviembre de ese año, los padres de acogida no tienen conocimiento de que se haya propuesto o valorado a ninguna otra familia candidata a la adopción proveniente de ningún lugar en Castilla y León, siendo en el mes de octubre de 2019 cuando reciben la úitima visita presencial de un técnico a los niños en casa.
Con el confinamiento de marzo a mayo de 2020, se les hace participes de que, tras cuatro años, se estudiaría pasar a la acogida permanente ya que, tras la excepcional experiencia superada y el tiempo transcurrido, no parece contemplarse otra alternativa, de hecho, en agosto se confirma que en septiembre se firmará la propuesta.
Por último, el 1 de octubre de este mes les informan, de repente, que se ha valorado positivarnente a una familia de adopción.
Todo se precipita hasta dar lugar a la entrega de los niños el pasado 23 de octubre, en una situación lamentable ante una familia que ha dado su vida por cuidar a unos pequeños que tenían en ellos a los máximos representantes legales y sentimientales.
Ahora, todo queda en manos de los recursos y de la previsible contestación por parte del Procurador del Común, pero el desgarro repentino a la unidad familiar creada causa dudas en un proceso donde no se ha tenido en cuenta a los pequeños, han denunciado sus padres de adopción.
"Por encima de todo queremos que se marque el interés superior de los menores afectados", señala Félix a Diario de Valderrueda, no sin antes añadir de que darán batalla para que esta lamentable situación no les vuelva a pasar a otros niños. "Nuestra voluntad es escuchar la conclusión del Procurador y que la ley de verdad señale y esclarezca el caso".
Fuente: Diario de Valderrueda
Fotografía: Imagen de la familia