Campaña viral de ayuda al ganadero multado por el atropello de un tren de Feve a una vaca
Campaña viral de ayuda al ganadero multado por el atropello de un tren de Feve a una vaca.
El hombre, de Ranedo de Curueño, se enfrenta a una grave sanción de 38.000 euros que provocará que tenga que cerrar su explotación ganadera.
En lucha para frenar un "atropello" de la Delegación del Gobierno...
La Delegación del Gobierno en Castilla y León inició recientemente un expediente sancionador a un ganadero del ayuntamiento de Valdepiélago, tras verse arrollada una de sus vacas por un tren de FEVE que hacía la línea León-Cistierna, imponiendo una salvaje multa de 38.000 euros a la persona afectada.
De esta forma, desde la Montaña Leonesa se ha iniciado una campaña, que ya es viral, en apoyo y ayuda de José Ignacio, el ganadero de Ranedo de Curueño que tendrá que hacer frente al pago de la cantidad demandada.
Desde que se conociera el caso, y más concretamente en la jornada de ayer, las redes sociales e internet se están inundando de mensajes de apoyo al ganadero.
De hecho, una publicación ha sido ya compartida en más de 1.600 ocasiones, además de acumular 300 comentarios y centenares de reacciones.
Se solicita que se retire la multa asignada y que provocaría el cierre de la explotación ganadero del vecino del Valle del Curueño.
Paremos el atropello de FEVE al ganadero.
Mi amigo José Ignacio, de Ranedo de Curueño, cuida todos los días más de cien vacas americanas sin cuernos. Además de ser un gran ganadero, es un eficiente etólogo experto en comportamiento animal, pero sabe poco del comportamiento de los políticos que nos gobiernan. Una vaca rompió el cable que impedia llegar a la via del tren y éste la atropelló. El tren no llevaba pasajeros, no descarriló ni sufrió daños y el incidente causó un retraso de cuatro minutos. Le pusieron una multa de 800 euros al calificar la sanción como «leve», y que pagó en tiempo y forma. Ahora se ha trasladado a la Delegación del Gobierno, que sanciona el hecho ya sancionado y lo tipifica como «muy grave» e impone la multa de 38.001 euros.
Jose Ignacio ha conseguido que su ganadería sobreviva a las encefalopatías espongiformes transmisibles (EET); a la enfermedad de Aujezsky; a la hipodermosis bovina; a la enfermedad de Maedi-Visna;;a la tuberculosis; a la fasciolosis, de IBR y BVD en bovinos; a la brucelosis bovina; a la fiebre aftosa o a la perineumonía bovina , y también ha sobrevivido a los abusos de las grandes compañías que fijan el precio de la leche por debajo del coste de producción y a las políticas españolas y europeas que pretenden acabar con la poca vida que queda en la montaña. De todo esto ha conseguido zafarse y ahora viene el político de turno, que desde un despacho (posiblemente en Valladolid) decide acabar con él, imponiéndole los 38.001 euros.
Bien puede decir lo que el emperador Adriano el día de su muerte: “no pudieron matarme mis enemigos y vine a morir a manos de mis médicos”. No pudieron con la ganadería de Jose Ignacio ni enfermedades, ni crisis, ni intereses económicos y políticos ocultos y vino a hundirle una delegación del gobierno en Castilla y león que no sabe nada de vacas, ni de trenes y si de sanciones desorbitadas.
Es el momento de parafrasear a Martin Niemöller:
"Primero vinieron a buscar a los mineros y no dije nada porque yo no era minero.
Luego vinieron por los agricultores y no dije nada porque yo no era agricultor.
Luego vinieron por los ganaderos y no dije nada porque yo no era ganadero.
Luego vinieron por los jubilados y no dije nada porque yo no era jubilado.
Luego vendrán por nosotros pero, para entonces, ya no quedará nadie que diga nada"
Eso es lo que va a pasar si permitimos el atropello que la delegación del gobierno en Castilla y León quiere hacer a Jose Ignacio.
Cabe señalar convoy no llevaba pasajeros a bordo, no descarriló ni sufrió daños aparentes, y el retraso que causó el incidente se cuantificó por la compañía en 4 minutos. El Área de Fomento de la Delegación del Gobierno le impone al ganadero titular de la explotación una multa de 38.001 euros, al margen de hacerse cargo también de la responsabilidad por daños si fuera el caso.
Se da la circunstancia que inicialmente el expediente lo instruyó la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria, reclamando la multa de 800 euros al calificar la sanción como “leve”, y que el ganadero pagó en plazo, pero ahora se ha trasladado a la Delegación del Gobierno, que sanciona el hecho ya sancionado y lo tipifica como “muy grave” e impone la multa antes citada.
Por todo ello, la campaña viral busca que el ganadero no tenga que hacer frente a ese importante pago, que podría provocar el cierre de su explotación para hacerlo efectivo.
Fuente: Diario de Valderrueda
Fotografía: Jose Ignacio Ganadería