El Parador de Cervera de Pisuerga rememorará su menú inaugural por su 50 aniversario
El Parador de Cervera de Pisuerga rememorará su menú inaugural por su 50 aniversario.
A partir de este sábado se podrá catar la reinterpretación de aquella comida de 1975, que incluía escudilla leonesa, trucha, chuleta de ternera San Cebrián y "tontos".
El Parador de Cervera de Pisuerga, situado en el Parque Natural Montaña Palentina, conmemora este año el 50 aniversario de su apertura y entre las actividades previstas para celebrar esta efeméride destaca la recreación de su menú inaugural para ofrecer a sus clientes un viaje en el tiempo hasta 1975.
La atractiva iniciativa culinaria arrancará este sábado, 22 de marzo, y permitirá degustar los sabores que paladearon los primeros huéspedes contemplando las mismas espectaculares vistas del embalse de Ruesga y las cumbres montañosas.
Para esta experiencia, el equipo de cocina del Parador, con el chef Jesús Alonso a la cabeza, ha diseñado junto al equipo de restauración de la compañía un menú especial que rememora la comida que se ofreció en la inauguración del Parador en 1975. Una propuesta en la que se ha optado por actualizar aquellos históricos platos, todos ellos exponentes de la genuina cocina tradicional de la montaña palentina, para adaptarlos a los gustos actuales.
Así, si la comida inaugural se abrió con una “escudilla leonesa”, un potaje de garbanzos al uso que toma su nombre de la pieza de la vajilla donde se presenta la elaboración, para esta nueva etapa el plato de cuchara se ha reinterpretado en una crema vegetal, dando paso a un hummus de garbanzo palentino, crujiente de espinaca y teja de sésamo. Un primer pase en el que los entrantes se completan con torrezno a baja temperatura laminado con emulsión picante.
A continuación, el día del estreno llegó a la mesa una “trucha montañesa botillón”, convencional elaboración de este popular salmónido muy abundante en la época en los ríos de la zona y que muy probablemente se presentaba frito y relleno con jamón. 50 años después, para este producto se ha optado por una elaboración más contemporánea: trucha marinada con aliño de yogur de oveja y frambuesa.
Por otro lado, en el menú primigenio no faltó una opción cárnica con uno de los productos comarcales estelares: la chuleta de ternera de San Cebrián. Así, el preciado corte de carne bovina se mantiene en el nuevo menú, que se acompaña para la ocasión con un milhojas de boniato como guarnición.
Hace medio siglo el remate a la puesta de largo gastronómica del Parador cerverano lo pusieron unos “tontos”. Por cercanía, se deduce que se trata de un postre muy antiguo originario del cántabro Valle de Liébana consistente en una masa hecha de miga de pan y huevo que se freía y posteriormente se cocía en leche con azúcar y canela. Ahora, de cara a las bodas de oro, se reproduce este ancestral dulce, sirviéndolo con natillas de leche merengada y helado de queso.
Reserva mesa para degustarlo
El menú especial 50 aniversario comenzará a servirse este sábado 22 de marzo y se ofrecerá a lo largo de todo el año durante los fines de semana, para un mínimo de dos personas. El cubierto tiene un precio de 42 euros.
Además, por un suplemento de 14 euros se ofrece una opción de maridaje de vinos de la zona. Los entrantes se armonizan con Corito, el primer vermut palentino, elaborado en la localidad de Torquemada; el plato de trucha se acompaña con el rosado Quinta Negredo, de la DO Arlanza; la chuleta de ternera se realza con el tinto crianza Carreprado, Vino de la Tierra de Castilla
y León producido en la comarca del Cerrato, seleccionando para el postre el toque dulce del vino de hielo Amantia, de Bodegas Valdeneros.
Asimismo, con el fin de dar opción a que cualquier cliente pueda probar al menos una parte del menú conmemorativo, se han incluido los “torreznos 50 aniversario” en la carta del restaurante y los “tontos” en la de postres.
Esta iniciativa gastronómica constituye una atractiva propuesta para planificar una escapada hasta este exclusivo enclave, ubicado en un paraje natural, alojándose en su acogedor Parador.
Fuente: Diario de Valderrueda
Fotografía: Parador de Cervera - Archivos - DDV