El Hospital de León se vuelca con sus pacientes más pequeños por el Día del Cáncer Infantil
El Hospital de León se vuelca con sus pacientes más pequeños por el Día del Cáncer Infantil.
Para dar la visibilidad de la enfermedad se repartieron lazos dorados y se leyó un manifiesto en un acto en el que participaron niños, familias y profesionales.
El Hospital Universitario de León conmemoró el pasado jueves el Día Internacional del Cáncer Infantil con un emotivo acto de apoyo a sus pacientes oncológicos más pequeños. Bajo el lema ‘La fuerza del lazo dorado, por un mundo más justo’ se repartieron lazos dorados y se leyó un manifiesto en un acto en el que participaron niños, familias y profesionales.
La actividad estaba organizada por la Federación Española de Padres de Niños con Cáncer, compuesta por 22 asociaciones, para visibilizar la realidad de estos niños. "Porque lo que no se ve, no existe. Porque el apoyo de todos es importante para sobrellevar un poco mejor esta realidad", afirman.
Así, en el Hospital de León se leyó el manifiesto de la Asociación de Padres, Familiares y Amigos de Niños Oncológicos de Castilla y León (PYFANO) y se repartieron lazos dorados, que significan empatía hacía quienes tienen y padecen esta enfermedad.
El jefe de Servicio de Pediatría, Juan Pablo Martínez, fue el encargado de leer el manifiesto en un acto en el que participaron pacientes pediátricos y familias, junto al gerente, Alfonso Rodríguez-Hevia, y los responsables de las direcciones médicas y de enfermería, acompañados de un buen número de los sanitarios que en León tratan y velan por el bienestar de estos pequeños, así como de voluntarios del CAULE que habitualmente desarrollan su labor en Pediatría.
En el manifiesto, escrito desde la perspectiva de un paciente oncológico infantil, se explicaba que un diagnóstico "cambia por completo nuestras vidas y las de nuestras familias en un segundo. Afecta a todo nuestro entorno, amigos, colegio… De repente, tenemos preocupaciones y situaciones que no deberíamos tener por edad".
Además, se hizo hincapié en que el "tratamiento, que suele ser prolongado en el tiempo, impide realizar todas las actividades cotidianas que hacía antes del diagnóstico; ir a cole, jugar en el parque; extraescolares, cumpleaños de amigos…"
Por tanto, defendió que es "el momento de superar esto y recordar que todos tenemos que ser iguales, con las mismas oportunidades y atenciones en cualquier lugar, y que esta enfermedad puede dejar muchas secuelas, por lo que, aunque haya terminado el tratamiento, se debe continuar con un seguimiento y una atención específica para esas necesidades", se añade.
Desde Pyfano y la Federación agradecieron al Hospital de León su participación en este día, "por creer en un futuro mejor para todos los menores con cáncer y dar voz a nuestras familias".
Fuente: Diario de Valderrueda
Fotografía: Hospital de León