España cierra térmicas mientras Alemania aumenta la producción de carbón ante la crisis del gas
España cierra térmicas mientras Alemania aumenta la producción de carbón ante la crisis del gas.
La guerra de Ucrania deja ver la vergonzosa política energética española cerrando la minería. Ahora, gran parte de los países de Europa reactivan sus centrales.
El Gobierno alemán anunció ayer domingo medidas para reducir la cantidad de gas que se emplea para generar electricidad y en la industria, con el fin de acelerar el llenado de los depósitos de reserva ante la restricción del suministro de gas ruso por la guerra en Ucrania.
El ministro de Economía y Energía, el verde Robert Habeck, declaró que la seguridad del abastecimiento está en estos momentos "garantizada" pero que la situación es "seria", por lo que hay que reducirse más. Por ello, señaló que como primer medida se pretende incrementar aún más la producción de carbón para la generación de electricidad.
El objetivo es reactivar las centrales térmicas de la reserva eléctrica "a corto plazo", algo que contrasta con la política energética española de los últimos años dando muerte a la minería y cerrando todas las centrales en el norte del país, especialmente en las Provincias de León y Palencia.
Así, mientras la grave crisis del gas por la guerra de Ucrania mantiene en alerta energética a muchos países de Europa, que ven en el carbón una salida factible, España sigue eliminando el carbón en favor de una energía verde que no llega y que no da para abastecer la demanda de las familias.
Un crisis más que ha dejado tirada a miles de familias de las comarcas mineras que ven como la misma Unión Europea que obligó a cerrar esta fuente de riqueza, reactiva sus centrales para abaratar costes, un coste que tendrá más capítulos fatales para España, después de la crisis con Argelia, país que amenaza seriamente con dejar de distribuir gas o reducir su venta.
Fotografía: Torre de refrigeración derribada en la Central de Velilla del Río Carrión