El Santuario de la Virgen del Brezo, una joya de la Montaña Palentina
El Santuario de la Virgen del Brezo, una joya de la Montaña Palentina.
Una aparición mariana y una romería histórica marcan este templo, situado en medio de una portentosa naturaleza, a 1.400 metros de altitud, en Villafría de la Peña.
Según la leyenda, fue la misma Virgen María quien encomendó la construcción del Santuario de la Virgen del Brezo, un impresionante templo enmarcado en la inmensa belleza natural del corazón de la Sierra del Brezo, en Villafría de la Peña; y dio lugar, a su vez, a una devoción tal que casi 500 años más tarde continúa convocando a cientos de fieles en romería.
El Santuario, ubicado a 1.400 metros de altitud, es una de las joyas de la Montaña Palentina y fue levantado sobre una antigua ermita, que ordenó construir Alfonso X el Sabio allá por el siglo XIII, después de que la Virgen se apareciera en sueños a dos pastores extremeños en el año 1478.
La Señora les pedía que fueran a un paraje llamado la Fuente del Brezo, donde se encontraba una imagen suya, que había quedado olvidada y oculta entre la espesura después de haber sido verenada durante un tiempo. Ellos, aunque sorprendidos, pensaron que simplemente se trataba de un sueño, hasta que la Virgen volvió a repetirles el mensaje dos veces más.
Cuando llegaron al lugar, los pastores encontraron una ermita en ruinas y en ella una talla románica, aunque fue una nueva aparición mariana la que les reveló que ese debía ser el lugar en el que habría de levantarse un templo para que los lugareños venerasen la imagen. Y así fue, desde 1535 existe constancia escrita de las peregrinaciones hasta este lugar, y la Virgen del Brezo se constituyó como patrona de La Peña.
El deslumbrante santuario que ha llegado hasta nuestros días cuenta con tres edificaciones neoclásicas del siglo XVIII: la iglesia de una única nave, la capilla de las confesiones y la hospedería, todo ello presidido por una impresionante fachada a modo de gran espadaña. Además, en su interior alberga la imagen de la Virgen con el niño, una talla románica del siglo XIII, para corroborar la leyenda.
Ahora son muchos los fieles que se acercan al templo, por ser un lugar cargado de paz y sosiego, en medio de una portentosa naturaleza, pero sin duda el momento más especial se produce cada 21 de septiembre, cuando por San Mateo cientos de peregrinos cumplen con la histórica romería y se dan cita en la explanada del Santuario para hornar a su patrona.
Fuente: Diario de Valderrueda
Fotografía: Palencia Turismo ;Wikipedia