Enrique Martínez presentó ayer en León su obra “Pedrosa del Rey en la memoria”

Enrique Martínez presentó ayer en León su obra “Pedrosa del Rey en la memoria”.

El autor estuvo muy arropado por gentes de su pueblo, amigos y conocidos en una cita que cerró guitarra en mano entonando el ¡Viva la Montaña!.

El pedroseño Enrique Martínez presentó al público leonés su segundo libro de fotografía antigua Pedrosa del Rey en la memoria.  

El salón de actos del prestigioso foro cultural leonés registró una muy respetable presencia de público ávido por conocer las novedades de esta su segunda obra, cuyo contenido versa sobre su pueblo natal. Pedrosa del Rey fue uno de los siete pueblos desparecidos para siempre como consecuencia de la construcción del embalse de Riaño, culminando así una catástrofe que nunca debió de haberse producido, y que fue consecuencia de una política de embalses ya entonces completamente caduca. Pedrosa del Rey desapareció para siempre el 22 de julio de 1987.

El autor estuvo muy arropado por gentes de su pueblo, amigos y conocidos que quisieron escuchar de primera mano las novedades que presentaba en su segunda obra. El libro, de claro contenido etnográfico, es un gran álbum de fotografías que recuerdan los paisajes, las gentes, las labores y las tradiciones de este hermoso pueblo de la montaña leonesa. Pretende ser, además, un aldabonazo para aquellos que un día decidieron culminar la ejecución de las obras y mutilar para siempre parte de la Montaña Oriental Leonesa.

Enrique Martínez estuvo acompañado por el historiador leonés Don Ramón Gutiérrez Álvarez, un hombre de gran prestigio en el mundo de las letras ya que es autor de catorce libros, alguno de los cuales fue elegido Libro Leonés del Año. Ambos autores se conocieron por su colaboración en la Revista Comarcal de la Montaña de Riaño, donde ambos son colaboradores habituales desde hace varios años. Además, estuvo presente el director del Instituto Leonés de Cultura, Roberto Soto, que abrió el acto, y el presidente de la Asociación Cultural San Bartolomé Apóstol, editora del libro, Demetrio González

Durante la presentación se proyectó un emotivo documental donde se pudieron ver las diferentes partes del libro, así como algunas de sus valiosas fotografías que pueblan su interior. El documental tuvo una muy buena acogida por parte del público asistente y recibió un largo y caluroso aplauso.

En los discursos de presentación Don Ramón, como gran historiador, habló de los rasgos más característicos de la historia de Pedrosa donde dijo que Pedrosa fue sede del Alfolí de la Sal, un privilegio que entonces era concedido por el rey y que no ostentaba ningún otro pueblo de la comarca.

El discurso del autor versó sobre los diferentes capítulos que componen la obra y dijo que solo dos edificios se salvaron de la catástrofe: la iglesia parroquial y el puente románico. La iglesia fue trasladada al nuevo pueblo de Riaño, donde permanece. Reivindicó Enrique una placa donde conste su procedencia.

El puente emerge cada verano cuando las aguas disminuyen como consecuencia del estío. Después de 35 años sumergido en las gélidas aguas del pantano aún resiste las embestidas del tiempo y es visitado por cientos de personas que aún se interesan por su belleza y por su historia. Pero cada vez aparece más deteriorado y un día caerá derrumbado, convertido en el último resistente que plantó cara al invasor.

En la obra se reivindica la memoria del pueblo puesto que mientras permanezca en la memoria, nunca morirá.

Y para sorpresa de todos los asistentes Enrique Martínez solicitó una guitarra que había entre el numeroso público e interpretó de viva voz el himno de la montaña.

Una gran ovación puso fin al acto reconociendo el buen trabajo hecho para los descendientes del pueblo, para toda la Montaña Oriental y para la Provincia de León. 

Fuente: Diario de Valderrueda

Fotografía: Acto celebrado ayer en el Instituto Leonés de Cultura