Ciudades más importantes y bonitas de Europa

Hablar de la importancia, y más aún, de la belleza de las ciudades es entrar debidamente en terrenos subjetivos. La mayoría de las ciudades europeas tienen su cuota de importancia y trascendencia cultural, histórica y económica, al mismo tiempo que la mayoría puede ser considerada bonita, sobre todo para los que allí residen. No obstante, sí es cierto que algunas ciudades logran destacar.

Europa es un continente bastante grande. Además, al estar conformado por una gran cantidad de naciones, las ciudades importantes no dejarán de aparecer ante los ojos de quien quiera recorrer el continente. Cada capital de cada país tiene importancia estratégica, económica y cultural para esa nación, así como también un sinfín de ciudades de primer orden. La belleza natural, arquitectónica, la ubicación y hasta la belleza estrictamente diseñada y creada por el hombre para tal fin, pueden hacer que cualquiera de las ciudades pueda integrar en este listado.

Ciudades más importantes y bonitas de Europa

En el listado de las ciudades más bonitas de Europa es inevitable caer en el terreno de la subjetividad. Porque la belleza de una ciudad es un aspecto que puede ser tomado desde múltiples perspectivas, lo que a su vez enriquece la discusión sobre las ciudades más bellas del continente.

Museos al aire libre

• Florencia: la capital de la Toscana es mundialmente reconocida por ser la cuna del arte renacentista. En cada una de sus callejuelas hay un sitio para admirar desde lo arquitectónico o desde la creación visual -pinturas, óleos-. De la misma manera, la ciudad cuenta con innumerables capillas, iglesias, templos y edificaciones de época que dejarán sin aliento a quienes los disfruten.
• Praga: una ciudad que oficialmente es considerada por muchos como un museo al aire libre, la capital checa es un lugar en el que sentirse a gusto disfrutando del arte que se transmite en sus calles. Aunque actualmente modernizada y preparada para el turismo, Praga es sinónimo del enigmático Puente de Carlos, pero también del Castillo, de la Catedral San Vito, del Reloj Astronómico, la Torre de la Pólvora, el Barrio Judío Josefov o la Plaza del Centro Histórico de Praga.

Ciudades que son jardines

• Vilna: la capital lituana es un excelente lugar para disfrutar de la arquitectura urbana en consonancia con la naturaleza viva. Es, por esa razón, un lugar imprescindible, pero también por el ambiente tan geek que siempre se respira en la ciudad y que hace que los turistas quieran volver.
• Liubliana: los imponentes jardines que van delimitando todos los espacios de la capital eslovena le han valido el mote del jardín de Europa, a juicio de sus pobladores. La tranquilidad que se respira en la ciudad, que parece anclada en el tiempo, pero que cuenta con servicios modernos e industrias de primer nivel, crean un ambiente perfecto para disfrutar.

La belleza singular

Hay otras ciudades de Europa que son mundialmente reconocidas y que muchas personas asocian a las más importantes y bonitas del continente. Venecia, surcada por sus canales de agua y navegada enteramente en góndolas; Santorini, de frente al imponente mar y con sus célebres fachadas blancas; o París, la denominada Ciudad del amor, que por esa misma razón ha sido considerada históricamente una de las más bonitas en todo el mundo.

La importancia de una ciudad a veces se mide en la mesa

Es inevitable que si se piensa hacer un tour por el continente o disfrutar del turismo en alguno de sus países, se piense en que comer en Europa. La comida es importante no solo para mantenerse bien, sino que es una excelente manera de entender la importancia cultural y gastronómica de una ciudad o un país.

De esa manera, incluso, muchas personas viajan y descubren la belleza auténtica de los lugares desde el mejor asiento de la mesa de un restaurante o de la barra de un pub.

Por ejemplo, Italia. Italia es un país que se descubre mejor a través de aquellos lugares muy poco llenos de gente -en lo turístico-, pero como todo italiano recomendará, siempre es mejor comer en el lugar donde hay más gente esperando por ser atendida. La comida italiana, desde las pastas y pizzas hasta los helados y demás postres, forman parte de la cultura europea completamente y ciudades como Milán, Bolonia, Parma o Nápoles, podrían considerarse bonitas e influyentes, también, por su gastronomía.

Francia y Bélgica comparten frontera y también una cultura gastronómica de postres horneados y rellenos con mermelada de frutas. La masa de hojaldre en el desayuno también es responsabilidad de la cultura de Bruselas y de París, al tiempo que la cultura gastronómica de pescados en Niza y Marsella -a su vez influenciada por el arraigo árabe y africano de esas ciudades- puede dar una idea de la importancia de la comida en esas regiones.

Así, al mismo tiempo, se podría hablar de todas las regiones y países. El fish and chips de los británicos, los estofados balcánicos, la cerveza báltica y los panes escandinavos son sinónimo de la belleza cultural y gastronómica europea.

Hay países que son especialistas en crear ciudades hermosas

Muchos países son conocidos por ser potencias gastronómicas, otros por tener una economía privilegiada o un sistema educativo interesante. Pero otros son expertos en crear ciudades hermosas, bastará ver el listado de las ciudades más bonitas de Alemania para entenderlo.

De nuevo, la belleza de una ciudad tiene sus matices de interpretación, pero sin duda es innegable que ciudades como Hamburgo -por su calidad arquitectónica y por lo imponente de algunos lugares, como el puerto o los puentes-, el aspecto medieval y atemporal de Rothenburg, donde parece que transcurre una historia de cuentos de hadas gracias a la excelente conservación de su casco antiguo; las casas delgadas -muy delgadas- y coloridas de Erfurt; la ciudad romántica y de la paz de Núremberg; Lübeck, la ciudad de la cultura más báltica de Alemania; o la influencia cultural romana de Augsburgo son algunas de las cosas que dejan bien parada a la nación alemana y a sus ciudades, que para muchos turistas están entre las más hermosas del continente.

La belleza, la importancia, la influencia, todo puede ser medido y ponderado a la vez que no dejarán nunca de ser subjetivos. Europa es un continente que cada cual deberá recorrerlo entero y comer en la mayoría de los lugares para forjar una opinión certera, y aun así no escapará de ser una opinión subjetiva. A pesar de ello, nadie negará que algunas ciudades forman parte del imaginario colectivo de la belleza europea.