Un joven deja Madrid para huir del estrés y buscar la paz en su pueblo leonés, Tejerina
Un joven deja Madrid para huir del estrés y buscar la paz en su pueblo leonés, Tejerina.
Una oportunidad laboral ha permitido a David Villarroel mudarse, dando una alegría a los vecinos de la localidad de la Montaña Leonesa: "siempre dije que me gustaría vivir aquí desde pequeño".
El joven David Villarroel ha dejado recientemente Madrid para huir del estrés y buscar la paz en el pueblo del que desciende y en el que ha pasado gran parte de sus veranos, Tejerina. Una oportunidad laboral le ha permitido mudarse, y a su vez, ha dado una alegría a todos los vecinos de la localidad de la Montaña Oriental Leonesa.
A sus 27 años es conductor de autobús y, aunque ya había trabajado de ello en la capital, cuando vio la oferta de trabajo de Alsa para cubrir las líneas Prioro-León y Velilla del Río Carrión-León no lo dudó.
Tomo la decisión porque, según explica, "siempre dije que me gustaría vivir aquí desde pequeño. Me encanta estar en Tejerina, aunque seamos pocos es una pequeña gran familia, me gusta esta vida, juntarme con los vecinos a última hora del día y hablar un poco en el bar".
Una vez que le seleccionaron para el puesto, el pasado martes llegó a la localidad del Alto Cea y el miércoles comenzó en el trabajo, pero pese al reciente 'aterrizaje' ya le ve las ventajas a su nueva vida, "dejar atrás el estrés sobre todo, no despertarte y tener que salir corriendo a trabajar por los atascos de Madrid, disfrutar de la gente, de la naturaleza, la montaña... Vengo buscando paz", cuenta.
A sus amigos este cambio, relata el joven, "les ha sonado raro, eso de que me vaya a vivir solo a Tejerina no lo entienden porque no tienen pueblo". Mientras que sus padres y familiares le han apoyado, "me dijeron que si yo era feliz ellos también", destaca Villarroel.
Sin embargo, quienes se han llevado una mayor alegría son los vecinos, que le han recibido "de la mejor manera, están encantados de que venga un chaval joven al pueblo. Porque además yo hago vida social con la gente mayor también, no tengo ningún problema, así que me han recibido genial".
Por ello desde la Junta Vecinal, a través de su alcalde pedáneo, Silverio Diez, han querido trasladarle lo emocionados que están, "es sorprendente que con 27 años, después de toda la vida en Madrid, le guste tanto el pueblo que venga y quiera trabajar aquí, estamos muy contentos de que llegue un vecino más".
Fuente: Diario de Valderrueda
Fotografía: David Villarroel
