La trashumancia llena Prioro en la 30 edición de la fiesta con más valor tradicional.

Cientos de personas disfrutaron de una jornada donde no faltaron más de mil merinas, que brillaron a los pies de los pendones. El tiempo amenazó lluvia pero se acabó rindiendo ante una Montaña entregada.

Un año más, Prioro volvió a demostrar por qué su Fiesta de la Trashumancia es de Interés Turístico Provincial. 

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El tiempo amenazó lluvia, pero salvo algún momento escaso y por la tarde, toda la jornada transcurrió con una temperatura agradable que provocó que cientos de personas llegadas de toda la Montaña, León, además de Palencia, Cantabria y Asturias, se rindieran ante el pueblo de las tradiciones.

La fiesta de homenaje a los pastores y a la trashumancia llegaba a su edición número 30 más viva que nunca, en un evento que marca el inicio del calendario festivo veraniego en esta zona del norte de la Provincia.

Los primeros visitantes empezaron a recorrer los diversos expositores de la feria comercial y artesanal, que reunió a más de una veintena de stands con todo tipo de productos, entre los que reinaban, como no, los agroalimentarios y gastronómicos.

La fiesta arrancó con el concurso-exhibición de Perros Mastines, donde se congregaron algunos de los mejores ejemplares de esta raza y, casi paralelamente, no podía faltar en un evento de estas características un espacio para el deporte rey de la provincia leonesa, por ello, también tuvo lugar un corro de lucha leonesa de base de la Liga de Verano 2024 en la que participaron decenas de niños y niñas con gran atención por parte del público.

También a media mañana se celebró el tradicional concurso de siega con guadaña, uno de los grandes atractivos, con hasta 20 metros de largo por cuatro de ancho de recinto, ante la atenta mirada de decenas y decenas de curiosos que no quisieron perderse esta tradición centenaria.

Las autoridades tampoco faltaron a esta cita, con Manuel Herrero, alcalde de Prioro, que hizo de maestro de ceremonias ante alcaldes y presidentes de juntas vecinales llegados de toda la Montaña Oriental.

Después, llegó uno de los momentos más emotivos de la jornana, con la llegada más de mil merinas trashumantes que fueron recibidas con pendones del Alto Cea y del Valle de Valdetuéjar.

El éxito de la jornada fue tal que bares y restaurantes, como es costumbre, colgaron el cartel de lleno y más de 300 personas se reunieron también en el nuevo pabellón para disfrutar de una comida típica pastoril, compuesta por chanfaina, caldereta de cordero, así como vino de la tierra, café y pastas. 

Tras ese momento gastronómico, por la tarde se hizo entrega de los premios del concurso de siega, del concurso de mastines, así como el homenaje a varios pastores presentes en la cita. No faltaron, además, los juegos infantiles con otra novedad, la carrera de madreñas que se siguió con gran atención por parte del público. Los bailes regionales infantiles, la actuación del grupo 'El Viento Al Sullar', charla de la Fundación 'Monte Mediterráneo' sobre la trashumancia, así como baile de la rosca y chocolate cerraron la jornada en Prioro. 

La noche y madrugada fue protagonista pero en la otra localidad del municipio leonés, con la verbena en Tejerina, que ayer, como ya ocurrió hace años, honraba en la misma jornada a su patrón, San Pedro.

Finalizaba así una jornada muy esperada y que recupera, una vez más, la esencia de las tradiciones que han marcado la vida de la Montaña Leonesa.

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Fuente: Diario de Valderrueda

Fotografía: Trashumancia en Prioro 2024 - DDV