¿En qué basarse para elegir una clínica de podología en Málaga?

La podología es una de las ciencias más necesarias en la actualidad. Aunque no lo parezca, la simple manera de pisar puede estar asociada a una gran cantidad de patologías futuras y, por supuesto, fáciles de prevenir. Ni qué decir en los casos de enfermedades o lesiones presentes en la zona del pie.

En primer lugar, es necesario resaltar la importancia de acudir a una clínica de podología cuando se tengan algunas molestias o patologías que no cesen en su malestar, dolor o incapacidad solo con reposo o remedios caseros, como se suele hacer creer casi siempre. Lo mejor es apostar por profesionales, ya que serán los indicados para diagnosticar, brindar un tratamiento eficaz y hasta brindar alternativas en casos más graves.

Clínicas especializadas en podología

Parece algo obvio, pero realmente no lo es tanto. No abundan las clínicas que son estrictamente expertas en el campo de la podología y la biomecánica del pie, por ejemplo. En el caso de Málaga, una recomendación ideal sería la Clínica PodiaFys, que no solo está especializada, así como todo su personal, en la fisioterapia y la cirugía de miembros inferiores y en podología en general, sino que también ofrecen los tratamientos más avanzados para las enfermedades más comunes del pie, lo cual representa tranquilidad y garantías.

Así las cosas, elegir una clínica que directamente trabaje con todo lo relacionado con la podología, será siempre mejor que buscar un recinto que “también” se encargue de la podología, aparte de otras cosas.

La experiencia profesional y las opiniones

Dentro de la podología, hay especialidades y, en cada una de ellas, hay profesionales con trayectorias envidiables, que serán la mejor solución para cuando sean necesarios tratamientos o intervenciones relacionadas con la salud de los pies.

Pero para elegir al mejor profesional posible lo mejor es utilizar internet, revisar información, ponderar las opiniones y las experiencias que otros pacientes ya han tenido, e incluso basarse en las informaciones que asociaciones especializadas publican, ya que será una manera óptima de validar la calidad profesional, la reputación y hasta la formación de cada uno de los especialistas, lo cual resultará trascendental para los resultados.

Entender la importancia de la podología

Para muchas personas, de forma errónea, la podología es una rama de la medicina que se encarga de atender patologías graves, lesiones de importancia y deformidades en los pies. Pero en realidad es una especialidad médica que va más allá de eso, por lo que un buen punto de partida para valorar sus servicios es entender, primero, las dimensiones o el alcance de la propia podología:

• Plantillas personalizadas: ni los ortopedistas, ni mucho menos las tiendas de zapatillas deportivas, cuentan con la capacidad o la formación para hacer estudios biomecánicos que permitan determinar qué plantilla es mejor para cada persona con base en su actividad. De esa labor se encargan los podólogos, de manera que es el primer lugar al que se debe acudir cuando se quieren plantillas para corregir la pisada, para aumentar el rendimiento en ciertas actividades o incluso para prevenir lesiones.
• Cirugías especializadas: muchas patologías o deformidades que se consideran graves, son en realidad posibles de curar mediante cirugías ecoguiadas o mínimamente invasivas. Es el caso de la metatarsalgia, los dedos en garra, el neuroma de morton, la temida fascitis plantar, el pie plano o lesiones en el tendón de Aquiles. Todas estas lesiones o patologías son corregibles acudiendo a una clínica especializada en tratamientos de podología.
• Estudio de la pisada: la podología y la medicina deportiva están íntimamente ligadas, ya que en todos los niveles de entrenamiento es imprescindible pisar correctamente para obtener el mejor rendimiento deportivo. Para ello es necesario realizar un estudio de la pisada, siempre de la mano de podólogos expertos, que serán los que determinen mediante conceptos de biomecánica cuáles serán las mejores soluciones para mejorar la calidad de la pisada, para evitar lesiones, para corregir deformidades, y por supuesto, para rendir mejor.