Fuertes rachas de viento causan desperfectos en Guardo, Velilla y Santibañez

El desprendimiento de un arco luminoso encima de un coche, árboles caídos y vallas postradas sobre las aceras fueron algunos de los daños. Velilla y Cervera también registraron incidentes

Los voluntarios del Parque de Bomberos tuvieron que retirar varios chopos que se desplomaron en el camino de ‘San Miguel’, una zona muy transitada por los guardenses.

Las fuertes rachas de viento registradas en las últimas 48 horas en el Alto Carrión han causado más de un sobresalto a los vecinos de la comarca norteña. A pesar de que la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ya había dado el aviso, esta situación pilló de imprevisto a muchos montañeses que contemplaban atónitos cómo el viento bufaba con bravura, los árboles se movían de un lado a otro con fuerza, las hojas revoloteaban y mucha ropa tendida al aire libre salía despedida a varios metros.

Pero no solo eso, también hubo varios incidentes causados por este fenómeno. El que más llamó la atención fue la caída de un arco luminoso instalado hace unos días para engalanar las calles de cara a la Navidad que se precipitó sobre un turismo estacionado en la avenida Asturias de Guardo.

En este mismo municipio se vino abajo parte del vallado perimetral que protege la obra de la futura Casa Consistorial -que fue reparado ayer por los operarios municipales-, farolas tiradas y numerosos contenedores de residuos aparecieron sobre la carretera, se desprendieron canalones de las cornisas de los tejados de algunos bloques de edificios y varios cables se desencajaron de la fachada de las viviendas.

Asimismo, los voluntarios del Parque Comarcal de Bomberos de Guardo tuvieron que intervenir en el camino de San Miguel, donde se desprendieron numerosos chopos sobre la calzada. Un incidente que afortunadamente se saldó sin daños materiales a pesar de que es un paraje muy concurrido por vecinos de todas las edades que eligen esta zona a la orilla del río Carrión para sus paseos diarios.

Unos efectos que eran visibles a primera hora de ayer, una jornada mucho más apacible en lo ventoso pero muy fría a pesar del intenso sol, y que fueron la comidilla de los vecinos de la localidad norteña en las conversaciones de cafetería y ascensor.

OTROS MUNICIPIOS. Situación similar se ha vivido en los municipios vecinos de Velilla del Río Carrión y Santibáñez de la Peña, donde el viento también pegó con fuerza. En el primero de ellos los contenedores volcados, las ramas desgarradas de cuajo y varias tejas desprendidas de las cubiertas de las viviendas fueron la nota predominante. Por el contrario, en Santibáñez, no hubo ningún incidente destacado.

Donde sí los hubo fue en Cervera de Pisuerga, donde los residentes también sintieron los efectos del viento. Allí se desprendió la goma antideslizante de la pasarela y uno de los carteles de información turística.

TORNADO EN 1998. Salvando las distancias, para muchos fue inevitable recordar el tornado que se registró en junio de 1998 en Velilla, una jornada que se saldó sin daños personales pero sí cuantiosos materiales a causa de este pequeño huracán registrado a primera hora de la tarde.

Lo que a priori iba a ser una apacible jornada de primavera rápido se truncó para quienes veían cómo la masa de aire se aproximaba con rapidez hacia sus viviendas.

Aquel día, en el que el cielo se tiñó de verde tal y como recuerdan algunos testigos, se saldó con varios árboles arrancados de raíz y con gran parte de las pizarras del tejado del Hotel Fuentes Carrionas, propiedad del Ayuntamiento, por los aires.

Fuente: diariopalentino.es

Fotografía: Ruben Abad