¿Sabes si estás eligiendo las sartenes adecuadas para tu cocina?
Obtener un buen resultado culinario no solo pasa por tener experiencia elaborando todo tipo de recetas. Y es que el hecho de disponer de los mejores utensilios también es fundamental. Por muy buena que sea una receta, incluso si los ingredientes utilizados para elaborarla son de excelente calidad, tal vez el resultado no sea el más óptimo si no cuentas con las herramientas de cocina adecuadas.
De todas ellas, una de las más importantes son, sin duda, las sartenes. El mercado actual pone a tu disposición una amplía variedad de tipos de sartenes, por lo que puede que a la hora de comprar una no sepas si estás eligiendo las más adecuadas para tu cocina. ¿Tienes dudas? Sigue leyendo, aquí describiremos las características más importantes que deberían tener las sartenes en función del tipo de cocina.
Cocina de inducción
En primer lugar, hablaremos de las sartenes destinadas a unas de las cocinas que cobra cada vez más presencia en nuestros hogares, las de inducción. Si este es tu caso y dispones de una placa de inducción, en esta comparativa encontrarás toda la información que necesitas para elegir la sartén más adecuada a este tipo de cocina. En ella ponen a tu disposición una guía de compra muy completa con las mejores recomendaciones y consejos.
Precisamente con el objetivo de escoger la sartén de inducción más adecuada, es esencial que te asegures de que reúne una serie de características. La primera de ellas guarda relación con el material.
El aluminio es el material más utilizado en las cocinas, sobre todo el aluminio fundido, pues es el más resistente, el más grueso y apenas se deforma con el tiempo. Eso sí, para que funcione correctamente deben llevar un componente ferrítico entre la placa y la sartén que genere un campo electromagnético.
Con respecto a esa placa, es decir, a su fondo difusor si es completo en lugar de por puntos mucho mejor. Cuanto más componente ferromagnético tenga mejor será su rendimiento en este tipo de placas. ¡Ojo! Las bases por puntos (si así lo indican) también son válidas, pero tardarán más en calentarse y por eso, no son las más óptimas.
No obstante, no son los únicos materiales disponibles, podemos sumar a esta lista otros como el acero inoxidable y el hierro fundido. El primero de ellos hace gala de un alto nivel de resistencia, aunque si no lleva antiadherente deberás controlar muy bien la temperatura para que los alimentos no se peguen. Por su parte, el hierro fundido es uno de los materiales más resistentes y que mejor conducen el calor, pero a su vez es el más pesado.
Más allá de los materiales, también es importante que te fijes en el tamaño. En este caso, al contrario que sucede en la vitrocerámica, no es necesario que el tamaño de la base de la sartén tenga el mismo diámetro que el fuego. Es decir, no hace falta cubrir todo el fuego para que el calentamiento sea eficiente. De modo que, si usas una sartén más pequeña que el fuego, solamente se calentará la superficie que esté en contacto.
Vitrocerámica o gas
Si la cocina de tu casa es de vitrocerámica o gas, lo cual también es bastante habitual, hay algunas características que, siguiendo el ejemplo del otro tipo de cocina, te proporcionarán un mejor resultado si la sartén en cuestión presume de ellas: recubrimiento antiadherente, resistencia del conjunto y tamaño adecuado.
A esta lista hay que sumar otros aspectos que no debes pasar por alto. Uno de ellos hace referencia al fondo de la sartén. Es aconsejable que la capa que esté allí presente se caracterice por distribuir muy bien el calor y que además, cubra toda la superficie del fuego para que el calor se reparta de manera homogéna por toda la superficie.
Por otra parte, no te olvides de un aspecto que se suele pasar por alto a pesar de la relevancia que adquiere: la facilidad de limpieza.
Al cocinar con una sartén para gas y vitrocerámica, sobre todo con la cocina de gas, es habitual ensuciar bastante la sartén. Es por ello que agradecerás que sea posible limpiarla de manera sencilla, a ser posible evitando meterla en el lavavajillas para que el recubrimiento tenga una mayor duración.
Finalmente, algo que también puedes tener en cuenta es la posibilidad de extraer el mango de la sartén. Aunque no es una de las características más importantes, resulta de gran ayuda para mantener tu cocina de vitrocerámica o gas bien ordenada, ya que guardar las sartenes pasa a ser bastante más sencillo, pues ocupan mucho menos.