Cómo escoger el generador eléctrico más idóneo

El mercado de los generadores eléctricos ofrece un vastísimo y completo catálogo de modelos destinados prácticamente cualquier posibilidad de uso. Sin embargo, y a sabiendas de que disponer de un buen generador puede facilitarnos el trabajo o incluso salvarnos el pellejo, es preciso atender a ciertos criterios para su elección. Tanto en base a su uso profesional o doméstico, como según otros parámetros más específicos.

La indespensabilidad del generador eléctrico

Seguramente, y especialmente durante un aparatoso apagón siempre acaecido en el peor momento, todo ser humano ha deseado estar en posesión de un buen generador eléctrico. Y no es de extrañar, dado que este dispositivo capaz de transformar energía eléctrica a partir de energía mecánica es un utensilio de indiscutible importancia. Tanto en el hogar, como en otros ámbitos de aplicabilidad tales como el lugar de trabajo o ante un desastre natural. De hecho, su uso incluso evita daños que podría producir un corte eléctrico y ofrece una atractiva rentabilidada largo plazo. Además de conferir una mayor seguridad ante situaciones de dependencia eléctrica.

Dentro de los generadores eléctricos precios hay de todo tipo. Ello depende en un gran grado de la capacidad y las prestaciones de cada dispositivo, así como de su funcionamiento en base a gasolina o diésel. E incluso en el caso de decantarse por un generador eléctrico inverter, de menor impacto acústico y toda una revolución en el mercado. Además, es preciso también llevar a cabo una buena labor de búsqueda. En esa línea, la distribuidora Generadoreselectricos.com, por ejemplo, es una de las páginas referentes del sector de la venta de generadores eléctricos y su catálogo, por lo tanto, ofrece todo tipo de modelos a un muy razonable precio.

Retomando el espectro económico, los precios de un generador eléctrico, según sus características, pueden oscilar entre los 400 y los 7.000 euros. La mutabilidad de un rango tan amplio radica en sus distintas tipologías. Pudiendo escoger un generador eléctrico tanto en base a su combustible, movilidad y fases, como a partir de sus funcionalidades, su arranque, refrigeración, insonorización o tipo de motor. Por ello, y a fin de no perderse en el vastísimo surtido, es recomendable filtrar la búsqueda bajo un criterio de necesidades básicas. Tanto si el motivo de adquisición del generador es preventivo ante posibles emergencias, como si su uso será estrictamente laboral.

Concentrarse en criterios básicos de búsqueda

Pese al gran repertorio de etiquetas bajo cuya lona se despliega el gigantesco arsenal de generadores eléctricos que el mercado ofrece, su elección podría, a grandes rasgos, reflejarse según cuatro criterios. A saber, y como remarcan los especialistas de generadores eléctricos sologeneradores.com: según su uso, potencia, motor y tensión. Cuatro filtros simples para comprender y dibujar el mejor criterio de elección para escoger el generador ideal, pudiendo ramificarlo en necesidades más específicas en caso de ser preciso.

En primer lugar, cabe clarificar si el uso del generador eléctrico será particular, por lo tanto de pocas horas, o profesional, necesitando una mayor envergadura cuanto a su potencia y tamaño y que, además, recibe la nomenclatura de grupo electrógeno. En el primer caso, será ideal un generador a gasolina de unas 3.000 RPM, mientras que con destino en fábricas o ámbitos de la construcción de una más intensiva aplicación, es recomendable emplear grupos electrógenos a 1.500 RPM. Del mismo modo y en segundo lugar, su potencia estará vinculada a ello y medida en KVA (Kilo Voltio Amperio).

En tercer lugar, el tipo de combustible con el que funciona el motor de un generador eléctrico es también un criterio a tener en cuenta. Si su uso está destinado a pocas horas, un generador a gasolina será más recomendable, mientras que, si éste será de uso más prolongado e incluso destinado a cubrir emergencias de fallos eléctricos, será preferible optar por uno a diésel, aunque pueda consumir más. Y en cuarto lugar, cabe contemplar la elección también en base a las fases del generador. Es decir, si el generador será trifásico, con dos fases de energía, servirá de gran beneficio para máquinas o ciertos momentos. Y en caso de ser monofásico, con un solo tipo de voltaje, será ideal para ocasiones específicas.

Profundizando en los criterios de búsqueda

Cubriendo otros parámetros antes mencionados, y si el futuro usuario del generador eléctrico precisa de una mayor noción de sus capacidades y prestaciones para escoger con más atino, el espectro se abre mucho más. Aún sobre el criterio básico, la insonorización es una opción imperante para usos, mayormente domésticos, en espacios cuyo entorno sea un vecindario, dado que una carcasa puede reducir sobremanera la contaminación acústica. En esa línea, demás, se encuentran los mencionados generadores inverter, que además proporcionan un filtrado de la energía para asegurar la calidad y la optimización de la precisión eléctrica.

Otro criterio básico común es su portabilidad. Donde un generador eléctrico tendrá más opciones portátiles que uno del grupo electrógeno, dado su mayor tamaño debido al uso profesional. Asimismo, la refrigeración es también un elemento muy a tener en cuenta para evitar sobrecalentamientos. Existiendo generadores refrigerados por agua, de mayor coste, pero de uso ininterrumpido; y refrigerados por aire, más económico, pero con necesarias paradas de 20 minutos tras unas horas de uso. Pero, al fin y al cabo, y sea cual sea el criterio, un generador eléctrico adaptado a cada uso es un elemento fantástico en cualquiera de sus ámbitos.

Entre sus ventajas, gozar de una potencia continua y desvinculada de la calidad del suministro eléctrico, la capacidad de enfrentarse impunemente a cualquier adversidad que atente contra la electricidad y, por encima de todo, una adquisición rentable con la que sacar partido dada su gran durabilidad. Si prácticamente todos nuestros ídolos cinematográficos, en muchas y demasiadas ocasiones, han salvado el pellejo gracias a un generador, ¿por qué no dar el paso y hacerse también con uno? Absolutamente nunca está de más disponer de soluciones versátiles a cualquier contratiempo o necesidad específica. Lo dicta el manual de prevención básico del ser humano y la tecnología lo ofrece en bandeja.

Fuente: Diario de Valderrueda

Fotografía: DDV