Este es el patrimonio de la Montaña Oriental Leonesa en la lista Roja de Hispania Nostra
Este es el patrimonio de la Montaña Oriental Leonesa en la lista Roja de Hispania Nostra.
Ocho templos, palacios, monasterios o infraestructuras se encuentran en ruinas o incluso en riesgo de desaparecer.
La lista Roja de Hispania Nostra recoge aquellos elementos del patrimonio cultural español que se encuentran sometidos a riesgo de desaparición, destrucción o alteración esencial de sus valores, con el objetivo de darlos a conocer y lograr su consolidación o restauración.
En la Montaña Oriental Leonesa son ocho los templos, palacios, monasterios o infraestructuras que se han hecho un hueco en ella, desgraciadamente, por encontrarse en muchos casos en ruinas.
Ermita del Bendito Cristo - Valverde de la Sierra
Comenzamos este recorrido por el patrimonio olvidado en Valverde de la Sierra, en pleno Parque Regional de la Montaña de Riaño y Mampodre, donde se ubica la ermita del Bendito Cristo, que se encuentra en un estado crítico. Fue edificada en el Siglo XV y, pese a estar declarada como Bien de Interés Cultural (BIC), tan solo era mantenida por una hermandad de vecinos del propio pueblo hasta que, por falta de medios económicos, fue donada a la junta vecinal para su conservación.
Aunque en 2007 se realizaron obras de rejunte de la piedra de los parapetos verticales, no se tocó la cubierta, que se encuentra en mal estado con tejas movidas y crecimiento de vegetación, lo que ha provocado el deslave por agua de lluvia de las piedras que componen la bóveda, y posteriormente, la producción de aberturas y grietas, lo que puede provocar su desplome.
Priorato de Santa María de Valdediós - La Vega de Boñar
Por su parte, el estado del Priorato de Santa María de Valdediós en La Vega de Boñar es de ruina avanzada, pese a conservar siglos de historia en sus piedras. Tenemos que remontarnos al 2 de abril de 1206 para dar con su origen, pues fue en esa fecha cuando Alfonso IX, último rey privativo de León, concedió permiso al monasterio cisterciense de Santa María de Valdediós, en el concejo asturiano de Villaviciosa, para levantar este priorato, donándole prados y heredades. Posteriormente, sumó un hospital de peregrinos junto al puente de San Pedro de Boñar y en 1305 obtuvo el derecho de cobro del pontazgo de esta infraestructura.
Según el Catastro del Marqués de la Ensenada, realizado en La Vega en 1751, la casa-priorato medía 32 pasos de largo y 24 de ancho, incluyendo el patio, y tenía una torre de 36 pies de altura. En la planta alta había seis cuartos y la baja disponía de recibidor, cocina, bodega, panera, caballeriza, pajar y patio. En la actualidad, no tiene cubierta y solo se conserva parte de las paredes, está rodeado de zarzas y escombros. Su último uso fue de palomar a comienzos del siglo XX.
Puente medieval de Pedrosa del Rey
Pese a ser uno de los pocos puentes medievales de la Montaña Oriental Leonesa, se encuentra sumergido bajo las aguas del embalse de Riaño. Aun así, en épocas de sequía es posible disfrutar de él, pues conserva buena parte de su estructura.
Su origen es romano, tal y como se puede observar en muchas de sus labras, reutilizadas en las diversas restauraciones que se han llevado a cabo desde la Edad Media hasta el siglo XVIII. Además, existe evidencia escrita de su existencia ya en el siglo XIII, en un documento en el que además, se afirmaba su importancia puesto que el pueblo de Pedrosa era conocido por esta infraestructura, paso obligado de la Cañada Real Leonesa desde la baja Edad Media. Fue reconstruido durante el reinado de los Reyes Católicos, y se volvió a reparar en 1720, 1735 y por último en 1914.
Ermita de San Roque de La Mata de la Riba
Otro edificio en ruina avanzada es la ermita de San Roque de La Mata de la Riba, un pequeño pueblo del municipio de Vegaquemada junto al antiguo Camino de Santiago. Se trata de un templo típico de los que jalonaban la Ruta Jacobea por la Montaña Leonesa, con una pequeña espadaña, atrio de entrada y arco. Sin embargo, carece de cubierta y solo se conservan las paredes, un arco central y la mencionada espadaña. Además, está colonizada por las zarzas y escombros, por lo que no es posible acceder a su interior.
El palacio de los Allende en Burón
El palacio de los Allende, edificado en Burón a principios del siglo XX al estilo de la arquitectura indiana, es uno de los elementos del patrimonio cultural de la Montaña Oriental Leonesa que en peor estado se encuentra. De hecho, apenas queda nada de él, tan solo piedras abandonadas en un prado.
Fue construido como residencia de verano de don Tomás de Allende y Alonso, un buronés que tras marchar a trabajar a Bilbao levantó una de las mayores fortunas de España en aquella época. Llegó a ser diputado de las Cortes, senador por León y Soria, además de propietario de varias empresas carboneras y accionista y presidente de bancos y compañías ferroviarias.
Se inauguró en 1917 y tiempo después, en 1973, sufrió un incendio que lo dejó seriamente dañado, salvándose su fachada. Sin embargo, el golpe final tuvo lugar en 1990, cuando las aguas del embalse de Riaño estaban a punto de inundar Burón. El Palacio fue desmontado y sus piedras numeradas con el objetivo de llevar a cabo una reconstrucción que nunca se llevó a cabo.
Iglesia de San Miguel en Crémenes
La antigua iglesia parroquial de Crémenes, sin uso desde hace años, se encuentra en ruinas, con la cubierta prácticamente hundida y el atrio desmoronado, y dedicada a usos agrícolas y ganaderos. Dentro se ha instalado un establo de diez pesebres para vacas y un corral para gallinas en el baptisterio y acceso al campanario.
El templo se construyó en el siglo XIV y contiene un retablo pintado en la pared del siglo XVIII, con las imágenes del Cristo rodeado de María y San Juan y una Anunciación. Además, en la iglesia destacaba la imagen de la Virgen, así como la de San Miguel, que procedía del desaparecido pueblo de San Miguel de las Fuentes. Ambas tallas fueron trasladadas a la nueva iglesia, que se terminó de construir en 1949.
Calzada del Esla
Esta vía conocida como 'calzada romana', aunque carece de cualquier elemento característico de la tipología constructiva romana y en realidad se corresponde con un camino del siglo XV o XVI, conserva algunas zonas que dan pistas de su magnitud. Son los tramos del Pajar del Diablo (Villayandre), el Escobio de Remanganes (Crémenes) y San Roque (Las Salas). Además, desde Cistierna, en su avance al norte, pasa al pie de castros prerromanos como los de Vegamediana, Valdegrija, Verdiago, Valdoré, Argovejo, Las Salas, Corona de Escaro.
En la actualidad se encuentra balizada como Camino Real PR-LE 36, y cuenta con buena señalización de los senderos que la recorren o intersectan. La última rehabilitación y limpieza se llevó a cabo en 2004, a través de ProMonumenta y el GAL Montaña de Riaño, y se centró en El Pajar del Diablo y la Entrecisa.
Iglesia de Santa Eugenia en Quintana de la Peña
El peligro que corre la iglesia de Santa Eugenia en Quintana de la Peña, localidad del municipio de Cistierna, es más que evidente. El templo, cuyo origen se sitúa en el medievo, se encuentra a las faldas de Peñacorada, dando la bienvenida al entrar al pueblo, y es perfecto reflejo del expolio que sufrió la población tras quedar abandonada. Apenas subsisten los muros de la nave principal y su hermosa espadaña, por su parte, las campanas fueron retiradas por el Ayuntamiento, la cubierta ha desaparecido y en el interior crece la vegetación.
Fuente: Diario de Valderrueda
Fotografía: Archivo - DDV; Hispania Nostra; Siro Sanz