Problemas en una pareja con el paso de los años

Toda pareja constituida, pasa por tres etapas básicas relacionales: el enamoramiento, la desilusión y el florecimiento.

Expertos en relaciones de pareja aseguran que, es en la etapa de desilusión en donde se consolida el vínculo más allá de la cama.

No obstante, sabemos que existen problemas de orden biológicos que trascienden el solo hecho de amarse, como, por ejemplo, la dificultad para lubricar en el caso de la mujer y, la pérdida de erección en el caso del hombre.

Por ello, viene bien saber más sobre la disfunción eréctil para tratarla adecuadamente, e identificar de manera oportuna sus posibles causas.

Le invitamos a conocer más variables que intervienen en la pareja con el paso de los años. Bienvenidos (as)

¿De dónde derivan los problemas de pareja?

Como toda interrelación humana, la pareja cuenta con la particularidad de ver muchos más elementos de correspondencia que otro tipo de relaciones.

Es aquí, en donde se procura mayor crecimiento humano, estableciendo permanente reflejo de uno al otro.

Esto precisamente, es lo que promueve las disidencias, desencuentros de perspectivas y demás roces sociales, más aún, en la etapa del florecimiento, en donde se consolida el vínculo relacional.

Tres problemas típicos en la pareja de años

Seguramente, son muchos los problemas que puedan derivarse de la convivencia en años; en este caso, hemos dedicado a tres elementos estrictamente relacionales que de modo común afectan a las parejas que llevan años de relación.

Conozca algunas de ellas:

1. Cambios de perspectivas

Parece poco cierto, pero lo que antes era, ahora no lo es; este fundamento, es lo que se aplica en las parejas cuando han alcanzado la madurez en la relación.

Hay una premisa de la psicología transpersonal, que señala que lo que es adentro, es afuera y, lo que es afuera, es adentro; es decir, se cada persona en su individualidad experimenta cambios que son reflejados en su comportamiento y visión del mundo.

¿Qué pasa con la pareja? Pues, experimenta la irritabilidad, desdicha y conflictos del otro, cuestionado lo que fue y ya no es.

2. Trastornos hormonales

Con el paso de los años, las parejas viven cambios hormonales, producto de su desarrollo evolutivo biológico; estos cambios, están directamente vinculados a procesos conductuales que definen su perfil de personalidad en el momento.

Por ejemplo, si su pareja, solía ser alegre y jocosa, de repente, experimenta una crisis de llanto perenne que le hace pensar a usted, que está irritable y quejona.

Necesariamente, no tiene por qué ser así; si existe un desequilibrio de la serotonina y presenta propensión a deprimirse.

3. Baja tolerancia

A pesar que, para muchas personas, el avanzar en edad supone mayor tolerancia y letargo en realizar las múltiples tareas, no ocurre así en la pareja.

Lo que antes era admisible, llega un punto de inflexibilidad total, que hace que las parejas discutan e impongan sus puntos de vistas.

Cada vez, la convivencia se hace menos llevadera, hasta el punto de desear compartir con hijos y nietos fuera, con tal de pasar tiempo fuera del hogar.

Cabe señalar que, esta conducta, suele durar un periodo corto, hasta aceptar la llegada del ocaso en sus vidas y el reconocimiento del “otro” como bastón para avanzar.

Conclusión

Decidir hacer vida en pareja, es una decisión que tiene sus altas y bajas, pero, sin duda, será una de las relaciones que más le hará crecer en planos más amplios que otro tipo de vínculo.

Esforzarse por comprender que la vida lleva etapas de cambios, es un factor indispensable para saber claudicar, avanzar y renovar fuerzas para continuar, pero, no desistir.