Guerra en Intorcisa al cortar un hombre el árbol donde vivía la cigüeña desde hace más de 50 años

Guerra en Intorcisa al cortar un hombre el árbol donde vivía la cigüeña desde hace más de 50 años.

Los vecinos denuncian la tala del árbol y la destrucción del nido en el que, hasta ayer, anidaban dos ejemplares de esta especie protegida.

Los vecinos de Intorcisa, pequeña localidad de unos 50 habitantes situada a 5 kilómetros de Guardo, en la Montaña Palentina, vivieron ayer uno de sus días más tristes.

La indignación se apodera de gran parte de la población después de que este viernes ocurriera un suceso que para muchos es "vergonzoso".

Todos los años, aproximadamente a finales del mes de diciembre, la cigüeña llega a este pueblo montañés y vive entre el vecindario hasta el mes de agosto (cuando emigra de nuevo). Desde hace más de 50 años, no hay uno solo en el que el ejemplar no les haya visitado. Y es que, desde hace más de medio siglo, la cigüeña tiene su nido en el mismo árbol, en el que vive y tiene sus crías temporada tras temporada.

El árbol en el que la cigüeña anidaba pertenece a una finca particular, que al menos hasta el día de ayer, "se encontraba prácticamente abandonada", agregan. Fue así durante la jornada del viernes cuando el propietario no dudó en talar el árbol y con ello destruir el nido de la cigüeña (en el que anidaban dos especies).

El grupo de vecinos que denuncia esta situación, desconoce hasta el momento si tenía algún tipo de permiso para cortar un árbol que, insisten, se encuentra en la finca de su propiedad. Lo que si saben sin ninguna duda, es que antes de talar el árbol no se reubicó el nido de la cigüeña en ningún otro lugar, lo que les lleva a sospechar que las autoridades ambientales no fueron informadas de ello.

Los vecinos afectados por este grave suceso aseguran, con total certeza, que el nido cayó con el árbol y no acudieron al lugar los agentes medioambientales para controlar,  retirar y reubicar el nido.

Cabe destacar que la Guardia Civil y el Seporna ya están investigando lo sucedido, pero ahora los habitantes lo que piden es "justicia" y que se busque una solución urgente para que, su cigüeña, la que lleva tanto años entre ellos, no tenga que emigrar y abandone para siempre Intorcisa.

La cigüeña es una especie protegida y como tal, debería de ser tratada tanto por los ciudadanos como por las autoridades competentes. Vivimos un momento en el que cada vez es mayor la concienciación sobre el reciclaje, las energías verdes, y el respeto de nuestro medio ambiente. Por tanto, comportamientos de este tipo no deberían de permitirse.

Esta concienciación sobre la importancia de la protección del medio natural, ha llevado a legislado a castigar cada vez de forma más dura y contundente los comportamientos que atentan contra el medio ambiente. En concreto, el artículo 334 del Código Penal, prevé pena de prisión de 6 meses a dos años o multa de ocho a 24 meses para aquellas personas que, “contraviniendo las leyes”, destruyan o alteren gravemente el hábitat de cualquier especie animal. Pena que se impondrá en su mitad superior si se trata de especies o subespecies catalogadas en peligro de extinción. Este comportamiento grave e irresponsable también está tipificado en la Ley 42/2007 de 13 de diciembre de Patrimonio Natural y la Biodiversidad, y en la Ley 4/2015, de 24 de marzo de Patrimonio Natural de Castilla y León, y está castigado con penas de multa.

Fuente: Diario de Valderrueda

Fotografía: Nido y estado en el que quedó el árbol tirado ayer en Intorcisa