Tendederos de ropa, los mejores para cada hogar

Existen en el mercado diferentes tipos de tendederos de ropa, pero es interesante tener en cuenta sus características, ya que cada modelo está pensado para unas necesidades distintas.

En los hogares actuales, la falta de espacio es bastante común. A la hora de poner la colada y tender la ropa, muchas veces no se sabe cómo tender la misma, puesto que los espacios no son lo suficientemente amplios como para realizar esta tarea sin impedimentos. Es por ello que lo mejor es disponer de un tendedero plegable o extensible, ya que se adaptan a todas las zonas y permiten tenerlos guardados cuando no hacen falta.

En https://comprartendedero.info/mejores-tendederos-extensibles/ se pueden encontrar infinidad de modelos en función de si se piensan colocar en exterior o en interior, la capacidad que pueden soportar, la robustez de sus piezas, etcétera.

En cualquier caso, siempre es bueno conocer los diferentes tipos de tendederos que hay, para elegir el que se adapte mejor a las necesidades de cada persona y a los espacios destinados para este fin.

A continuación vamos a destacar de forma resumida los distintos tipos de tendederos que hay en el mercado para cada tipo de ocasión.

Tendedero extensible de pared

Uno de los clásicos tendederos para aquellos que tienen poco espacio, pues su sistema es el de acordeón. Es un producto con gran capacidad cuando está abierto, pero que cerrado prácticamente no ocupa espacio. Es resistente y de fácil instalación, pudiéndose instalar en zonas exteriores e interiores.

Tendedero de ventana

Son más específicos y no cuentan con demasiada capacidad, habitualmente se utilizan para prendas de menor tamaño. Es de fácil instalación, ya que tienen enganches que permiten amarrarlos a la ventana.

Tendedero de pie

Es el modelo más utilizado, plegable, que está provisto con unas alas para que pueda tener más capacidad. Fácilmente transportables, se pueden colocar en prácticamente cualquier espacio de la vivienda.

Tendedero giratorio

Es uno de los más originales, debido al sistema giratorio que tiene. Se suele utilizar para los espacios exteriores, y sobre todo, para secar prendas o piezas más pequeñas, como los zapatos o los trapos de cocina.

Tendedero de cuerda

Generalmente son automáticos, puesto que las cuerdas que tiene se recogen fácilmente, a través de un sistema de muelles que tienen integrados. Cuentan con una gran capacidad y ahorran espacio, debido a que se pueden almacenar y recoger cómodamente.

Tendedero de poleas

Son los menos habituales, ya que en ocasiones son incómodos de utilizar por el sistema de poleas que tienen. Aunque es importante comentar que se adaptan a cualquier distancia, por lo que aumenta su capacidad.

Tendedero de techo

Estos tendederos son bastante prácticos, ya que se pueden instalar en espacios muy reducidos. Se recogen con facilidad y tienen la capacidad de poder regular la altura, según se necesite.

Tendedero de alas

Es un tipo de tendedero que cuenta con varias alas que se pliegan. Son ideales para secar las piezas de menor tamaño, pero no para las grandes, debido a que no cuenta con demasiada capacidad.

Tendedero extensible interior

Uno de los clásicos que se ven en casi todas las casas que tienen falta de espacio. Las alas de este tipo de tendedero le aportan más capacidad para tender más ropa, y además, suele contar con un sistema de bloqueo para que no se abran cuando está cerrado.

¿Qué hay que tener en cuenta para elegir un buen tendedero?

En el caso de necesitar comprar un tendedero, teniendo en cuenta todos los modelos que existen en el mercado, es importante fijarse bien en algunos aspectos clave, para hacer la mejor elección.

En este sentido, una de las principales cosas que hay que tener clara es la ubicación en la que se va a poner el tendedero. De esta forma, se sabrá con qué espacio se cuenta para su instalación y así escoger un modelo de mayor o menor tamaño.

También es importante conocer si el tendedero elegido cuenta con un sistema de plegado o no, para poder facilitar su almacenaje en el momento que no se utilice.

De igual modo, la capacidad es muy importante, ya que hay que tener claro cuántas prendas o piezas se podrán tender. Teniendo en cuenta que una colada normal puede ser de unos 20 kilos de ropa.