La Junta dará ayudas de hasta 400 euros para que internet de alta velocidad llegue al mundo rural
La Consejería de Fomento y Medio Ambiente ha presentado una línea de subvenciones para mejorar el servicio universal de acceso a internet de banda ancha por vía satélite en la provincia de León, estableciendo una cuantía máxima de 400 euros con el fin de apoyar su contratación en zonas sin servicio del medio rural.
De esta forma se pretende llegar a las llamadas zonas blancas, que son principalmente aquellas rurales donde el satélite es la única solución tecnológica posible al no disponer de servicio de las operadoras por no ser rentable económicamente.
La directora general de Telecomunicaciones, María Victoria Seco, ha señalado como prioritaria la mejora del servicio de las conexiones a internet en la zona rural. «Hemos presentado a todos los alcaldes del medio rural la reciente convocatoria». La encargada del área reconoce que es algo exclusivo, ya que será la única que va a llegar al medio rural, y es «fundamental» que pueblos y ciudadanos del medio rural y urbano tengan derecho a los mismos servicios.
Seco entiende que la orografía, despoblación, dispersión y envejecimiento de los ciudadanos en estas zonas genera que las altas tecnologías de banda ancha necesiten de obra civil que encarece mucho la llegada de la fibra óptica a pueblos.
La rentabilidad
Del mismo modo, ha destacado que las compañías operadoras de internet se mueven por rentabilidad económica y «no es rentable para ellos llevar estas tecnologías punteras que permitan ver la televisión por internet o jugar en red. Tardarán más tiempo y mientras la tecnología satélite es la más rentable para el medio rural».
La Junta de Castilla y León ha tratado en la reunión mantenida con los alcaldes de los municipios rurales leoneses que estos comprendan el objetivo final de que las personas de este medio sin internet o con bajas velocidades instalen un satélite con su ayuda. «Es una ayuda máxima de 400 euros que implica el equipamiento e instalación de satélite individual en las viviendas». María Victoria Seco ha destacado la «mala prensa» que tiene este sistema de acceso a internet, por ello ha recordado que se trata de una antena parabólica «discreta» que se coloca en la azotea y tiene un servicio universal, llegando todos los puntos del territorio con velocidades de 22 o más megas.
6.000 personas sin acceso a la red
En la comunidad existen, actualmente, 6.000 personas sin acceso a internet, a lo que se suman aquellos usuarios que cuentan con una baja velocidad de un mega, suministrado por Telefónica Movistar, algo que resulta «insuficiente para un negocio o mandar correos», por ello la Junta quiere mejorarlo para tener acceso a «un internet más digno y con más prestaciones para los ciudadanos».
Lo que podía limitar a estas personas a alcanzar la mayor velocidad, el coste de 400 euros que tiene el satélite, es la barrera que quiere eliminar la Junta de Castilla y León, que se muestra dispuesta a financiar esta cuantía «y a partir de ahí, los ciudadanos tienen que contratar el servicio que quieran con una compañía, a partir de 30 euros al mes, porque no podemos pretender que sea más barato que en el medio urbano», ha finalizado la directora general de Telecomunicaciones.
Por su parte, el presidente de la Diputación Provincial de León, Juan Martínez Majo, ha reconocido que esta es «una de las demandas más importantes de los ciudadanos». Hace un año, el máximo responsable de la institución ya dijo que las vías terrestres son importantes, pero las nuevas tecnologías son para el medio rural «importantísimas». Por ello, la Diputación apoyará «a mano tendida» a la Junta para que los vecinos y pueblos tengan la cobertura necesaria para poder realizar las labores comunes desde casa.
Ambas instituciones realizarán un plan integral para que la provincia pueda tener cobertura en todos los núcleos rurales. El objetivo es diseñar un mapa para reconocer las competencias de cada uno y que el servicio de alta velocidad de internet llegue a cada rincón de León.
Fuente: leonoticias.com, Ruben Fariñas
Fotografía: Agencia Ical, Campillo