Una joven de la Montaña Palentina disfruta de un bautismo de vuelo con la Guardia Civil
Una joven de la Montaña Palentina disfruta de un bautismo de vuelo con la Guardia Civil.
Inés Ríos, estudiante del IES Guardo, ha vivido una experiencia única a bordo de un helicóptero tras ganar el concurso de dibujo del Servicio Aéreo.
La joven Inés Ríos, de Velilla del Rio Carrión, disfrutó el pasado martes de un bautismo de vuelo a bordo del helicóptero H135 de la Guardia Civil, premio que obtuvo como ganadora provincial del concurso de dibujo organizado por el Servicio Aéreo de la Guardia Civil con motivo de sus 50 años de historia.
La estudiante de 1° de Bachillerato en el IES Guardo vivió una experiencia única, que le permitió sobrevolar su hogar, la Montaña Palentina y algunas de sus emblemáticas cumbres como el Espigüete (2.450 metros), y el Parque Nacional de Picos de Europa, para ver desde el 'cielo' el Naranjo de Bulnes (2.519 metros). De hecho, llegó a poder ver a varios montañeros haciendo cumbre en otras cotas cercanas.
A las 11:00 horas del pasado martes, un helicóptero H135 del Servicio Aéreo de la Guardia Civil con base en León llegaba al helipuerto de Guardo, donde Inés esperaba impaciente, junto a su familia, el momento de subir a bordo de la aeronave y poder disfrutar de un vuelo inolvidable.
En un primer momento, los dos pilotos del helicóptero entregaron a Inés un diploma conmemorativo por su bautismo de vuelo, y esta les explicó en qué consistía su dibujo ganador. Después, tras explicarle las partes del helicóptero, permitieron a la joven comprobar lo complejo que resulta pilotar la aeronave, ya que se requiere la interacción casi simultánea de sus tres mandos: el colectivo para dar mayor o menor fuerza de sustentación; el cíclico para variar la orientación de las palas del mismo rotor y poder cambiar la dirección de la fuerza de sustentación; y los pedales para variar la orientación de las palas del rotor de cola y poder controlar la dirección de vuelo.
Finalizada la parte teórica, tanto Inés como sus padres pudieron disfrutar de casi una hora de vuelo, durante la cual pudieron ver desde las alturas las localidades de Guardo, Velilla del Rio Carrión, Potes, Santander o Gijón entre otras. Además, también pasaron cerca de importantes cumbres de la Montaña Palentina, como el Espigüete, y de los Picos de Europa, como el Naranjo de Bulnes.
De nuevo en el helipuerto de Guardo, llegó el momento de despedir a los dos pilotos, no sin antes animar a la premiada a que estudie con consistencia para que pueda ingresar en la Guardia Civil y convertirse en piloto del Servicio Aéreo.
Fuente: Diario de Valderrueda
Fotografía: Ayuntamiento de Guardo y Comandancia de la Guardia Civil de Palencia
