El investigador leonés Juan José Badiola, investido Doctor Honoris Causa por la ULE

El investigador leonés Juan José Badiola, investido Doctor Honoris Causa por la ULE.

El veterinario, natural de Tolibia de Abajo, reconoció sentirse muy agradecido e ilusionado por este homenaje "pese a que se dice que nadie es profeta en su tierra".

El veterinario e investigador leonés Juan José Badiola fue investido ayer como Doctor Honoris Causa por la Universidad de León (ULE), el máximo reconocimiento que una institución académica puede brindar. El científico, que fue clave en la crisis nacional por el ‘Mal de las Vacas Locas’, reconoció sentirse "valorado y apreciado", muy agradecido, e ilusionado por este homenaje "pese a que se dice que nadie es profeta en su tierra".

El acto se celebró en el Aula Magna San Isidoro y su padrino fue el profesor Valentín Pérez, discípulo de Badiola, que se encargó de elogiar al nuevo Honoris Causa realizando un detallado recorrido por los méritos que adornan la larga trayectoria del científico, sus estancias en Alemania y Estados Unidos, su actividad docente, su elocuencia y cercanía con los alumnos, y su justicia a la hora de imponer las calificaciones.

Valentín Peréz destacó también su importante trabajo de investigación, sus publicaciones en revistas de prestigio, los 40 artículos, los 8 libros publicados, las 38 tesis doctorales dirigidas y su gran labor divulgativa, así como la manera en que ha trasmitido a la sociedad “importantes aspectos relacionados con la salud pública”, en momentos tan delicados como la crisis de las vacas locas, la gripe A, la covid-19, a viruela del mono, etcétera.

Una vez recibidos los títulos de su nueva condición: ‘birrete laureado’, como corona de saber y de sus altos méritos, y ‘anillo’ para sellar dictámenes y censuras inherentes al cargo, Badiola afirmó en su discurso que se siente leonés “por encima de todo”. Y en sus palabras de recuerdo para sus padres, especialmente para su madre, a la que dijo sentirse muy unido ya que influyó mucho en su formación, reconoció también el vínculo que todavía mantiene con la localidad familiar, Tolibia de Abajo, a la que regresa todos los veranos. Así, agradeció también la presencia en la sala del alcalde de Lugueros, Emilio Orejas.

Badiola aprovechó para mostrarse agradecido con todas las personas y entidades el apoyo que le han brindado, e insistió en que se sentía “en deuda con mucha gente”. Expresamente citó a su esposa, recientemente fallecida, y a sus tres hijas, que siempre le ofrecieron comprensión, apoyo y aliento, y también a sus discípulos y colaboradores.

Su discurso finalizó con unas palabras dedicadas a la universidad, que en su opinión “desempeña un papel clave en el progreso de la sociedad”, y apuntó que siempre hay que continuar aprendiendo y adquiriendo nuevos conocimientos para dar respuesta a las nuevas necesidades que surjan en la sociedad.

“Ha sido siempre un hombre de universidad, pero con un concepto claro de que la universidad no puede quedarse dentro de sus edificios, que tiene que estar siempre al servicio de la sociedad, y en su caso sobre todo con la profesión veterinaria y su entorno, contribuyendo notablemente al desarrollo de la misma y de la sanidad animal, con sus conocimientos y su capacidad para trasmitirlos, y que sin duda fue determinante para tranquilizar a la sociedad en el denominado ‘Mal de las Vacas Locas’ y en posteriores zoonosis, enfermedades transmitidas de animales al hombre, y de las cuales es un gran conocedor”, destacó el rector de la ULE, Francisco García.

Además, García relató algunas anécdotas de cuando conoció a Badiola en 1976 mientras, como joven estudiante, esperaba la llegada a clase de un nuevo profesor y quien entró en el aula fue “un joven con melenas y bata blanca”, que se puso a borrar la pizarra, en tanto que los estudiantes “seguimos hablando entre nosotros sin prestarle atención, pensando que era un alumno interno”. En poco tiempo el nuevo profesor “cambió la forma de enseñar, de participar en la enseñanza y aprendizaje y de ganarse el respeto de todos”.

El acto contó con la presencia de diversas autoridades que quisieron sumarse al homenaje, entre las que destacaban el alcalde de León, José Antonio Díez; el alcalde de Ponferrada, Marco Antonio Morala; el alcalde de Valdelugueros, Emilio Orejas; el delegado del Gobierno en León, Faustino Sánchez; y el delegado territorial de la Junta, Eduardo Diego; entre otros.
 

Fuente: Diario de Valderrueda

Fotografía: Universidad de León