Cuando la minería era fuente de riqueza para Maraña
Cuando la minería era fuente de riqueza para Maraña.
Antes de ser conocido como 'la fábrica de la nieve', el municipio leonés vivió una gran prosperidad con la extracción de mercurio y cinabrio en las minas Carmina y Escarlati.
Antes de ser conocida como 'la fábrica de la nieve', Maraña vivió una gran prosperidad gracias a la minería. En la década de los 60, pese a que pueda sorprender, el municipio leonés era un hervidero de actividad que discurría en torno a las explotaciones de Minas de Tarna S.A. en la mina Carmina primero y, posteriormente, en la mina Escarlati.
La extracción de cinabrio y mercurio era muy prolífica fruto del volumen de producción de ambas minas se llegó a instalar, junto a la ermita de Riosol, un lavadero y una pequeña planta donde era tratado el mineral procedente de ambas minas, que llegaba hasta allí a través de un cable aéreo.
Para poner en valor la relevancia que alcanzó Maraña en el sector minero es necesario destacar que, por aquel entonces, la extracción de mercurio en la provincia de León, junto a Asturias, equivalía al 15% de la producción nacional y situó a ambas regiones entre los 10 primeros productores mundiales de mercurio.
Mina Carmina
Situada en el Valle de Riosol, en el paraje conocido como Buecicardiel cerca del Puerto de Tarna, se puso en explotación en la década de los 50 y estuvo en activo hasta 1970. Contaba con seis niveles y galerías excavadas en la roca con una perfecta ventilación, de las que se extraía principalmente cinabrio y fluorita.
El exterior de la explotación es accesible y visitable, se llega a ella a través de la pista que, en dirección sur, parte del mismo caserío de Riosol. La mina fue cerrada en 1970, y aunque dos de sus niveles se encuentran en la actualidad hundidos, los cuatro restantes se pueden visitar, aunque conlleva un importante riesgo.
Mina Escarlati
Fue una explotación de menor entidad que la vecina mina Carmina y la época de mayor actividad se sitúa entre 1969 y 1972, aunque los intentos iniciales de extraer mineral tuvieron lugar en los años 40. En julio de 1958 se otorgó el permiso de investigación y en febrero de 1963 la concesión minera.
Los trabajos cesaron en 1972, como consecuencia del declive provocado por la caída en picado del precio del frasco de mercurio, motivado en gran parte por los primeros desastres medioambientales causados por el uso indiscriminado y el tratamiento irresponsable de los residuos de este mineral. Aun así, fue una de las últimas minas de cinabrio en cerrar.
No se conoce a ciencia cierta en qué momento se empezó a explotar el cinabrio de estas minas de la zona de Maraña (mina “Escarlati” y mina “Carmina”), pero es probable que el mineral que afloraba fuera ya recogido o se extrajera de pequeñas trincheras, o incluso con rudimentarios trabajos mineros en la prehistoria, como así lo atestiguan martillos de cuarcita con engaste recuperados en ambas minas.
Cuando se iniciaron los trabajos modernos en la mina “Escarlati”, se halló una excavación en embudo con pequeños peldaños helicoidales en sus paredes, compatible con trabajos mineros prehistóricos, que son más evidentes en la cercana mina “Carmina”. El cinabrio fue un mineral reconocido y apreciado desde tiempos remotos, y así lo atestigua, entre otros muchos hallazgos, la gran cantidad de cinabrio molido recuperado en en dolmen de La Velilla (Palencia) datado en el año 3000 a.C.
Los primeros documentos históricos de la explotación del cinabrio en la zona cantábrica nos remiten a 1620, con una autorización para “beneficiar una mina de azogue en a feligresía de Luiña, concejo de Pravia, principado de Asturias.”
En todo caso la minería industrial se inicia en 1840 y se mantiene en niveles bajos hasta iniciar un repunte en los años 40 después de la Guerra Civil y sobretodo en los años 60 y principios de los 70. En esos años el mercurio extraído en el Distrito Mercurial del Norte (Asturias y León) llegó a los 10.000 frascos anuales (el frasco es la medida internacional del mercurio y equivale a 34,5 kg). La producción en estos años se obtenía de un total de entre seis y diez minas, que empleaban unos 700 mineros, y suponía el 15% de la producción nacional (Almadén era el gran productor) pero es de destacar que en aquel momento equivalía al 5% de la producción mundial, situando a esta zona entre los 10 primeros productores mundiales de mercurio.
Fuente: Diario de Valderrueda
Fotografía: Jaime García; M. Cañón; J.H. Velasco
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