León acoge hoy por 1ª vez en su historia las Cortes de Castilla y León

Las Cortes de Castilla y León mecen hoy la Cuna del Parlamentarismo. Por primera vez y por un día. Donde hace 828 años se sentó por primera vez el pueblo llano, de la mano de Alfonso IX, hoy entrarán 84 procuradores y procuradoras trasplantados desde el hemiciclo de la Villa de Prado en Valladolid al claustro de San Isidoro de León.

Del siglo XII al siglo XXI. Del hito histórico que en 2013 convirtió a los Decreta de León de 1188 en Memoria del Mundo (Unesco) y de paso reconoce en ellos los primeros antecedentes del parlamentarismo moderno europeo, a un pleno histórico con las quejas ciudadanas como protagonistas. El Procurador del Común, Javier Amoedo, presenta el informe del 2015, con un aumento de las reclamaciones del pueblo a las administraciones Comunidad.

Diecisiete años contaba Alfonso IX cuando en 1188 asumió el reinado de León, Asturias, Galicia y las Extremaduras a la muerte de su padre Fernando II a primeros de año en Benavente. Tras ocuparse de su entierro en Santiago de Compostela, como deseaba el monarca leonés,

convocó su primera curia regia en León.

Treinta y tres años han pasado desde que las primeras Cortes de Castilla y León se constituyeron en la Villa de Tordesillas, antes de ocupar el castillo de Fuensaldaña durante 25 años, como sede provisional, hasta que en 2007 se estrenó la sede oficial en Valladolid.

León será sede por un día. De Alfonso IX a la novena legislatura autonómica. Dos acontecimientos en los que el pueblo es el protagonista, antes encarnado por los representantes de las ciudades y ahora encarnado por los parlamentarios elegidos hace un año en los comicios autonómicos.

Si en aquella curia histórica es muy probable que no hubiera mujeres o muy pocas, en las Cortes que hoy se sentarán en el claustro, ocho siglos después, se ha alcanzado la paridad gracias a las leyes que obligan a que así lo sean las listas electorales. Con menos mujeres que hombres puesto que ellas ocupan el 40% de escaños (34) y ellos un 60% (50).

En la Plaza de San Isidoro, por seguir el paralelismo, se repetirán las voces que, cuentan algunos estudiosos, lanzaba hace ocho siglos el pueblo, alborotado, a las puertas del claustro románico de la Basílica. Cuentan que el rey les oía y que «ordenó que entrasen algunos y dijisen lo que deseaban», como apunta Fernando de Arvizu, echando mano del «sentido común» y de la teoría esbozada a finales del siglo XIX por Laureano Díez Canseco.

Los pendones del viejo reino, si es que ondearon aquel día, hoy se sustituyen por el gigantesco escudo de las Cortes de Castilla y León que cubrirá el claustro, que ayer supervisó la presidenta, Silvia Clemente, acompañada del alcalde de León, Antonio Silván, el procurador del Común, Javier Amoedo, y el abad de la Basílica de San Isidoro, Francisco Rodríguez.

En aquel entonces, el pueblo llano, los magnates del reino y el clero se juntaron por primera vez en León en torno a su rey. Hoy la máxima autoridad será el presidente de la Junta y procurador por Burgos, Juan Vicente Herrera. El rey no estará.

Cuentan las crónicas, los documentos originales no se conservan, que en aquellas primigenias Cortes de 1188 se aprobaron los diecisiete decretos con la finalidad de establecer la paz en el reino. Los estatutos establecen la inviolabilidad del domicilio, prohibe las asonadas y ordena que se demande la justicia al rey, también sanciona la destrucción de casas, así como la tala de viñas y árboles para resarcir supuestos agravios. Da a las ciudades la facultad de ejercer la justicia y prohibe que los bienes por los que se pagan foro al rey puedan ser donados al clero, entre otras cosas.

Los Decreta forman parte de las joyas del Archivo Histórico Nacional, que acaba de cumplir 150 años, y se encuentran dispersos en otros lugares como la Biblioteca Nacional de España, el Archivo Catedralicio de Orense y el de Zamora, la Biblioteca Capitular y Colombina de Sevilla y la British Library, de Londres.

El más antiguo es del siglo XVI. Son los textos latinos conservados en los códices de la Biblioteca Nacional y traducidos por José María Fernández Catón. Es el texto que acredita la presencia ciudadana en la curia: «En el nombre de Dios, Yo don Alfonso, rey de León y de Galicia, habiendo celebrado curia en León, con el arzobispo y los obispos y los magnates de mi reino y con los ciudadanos elegidos de cada una de las ciudades, establecí y confirmé bajo juramento que a todos los de mi reino, tanto clérigos como laicos, les respetaría las buenas costumbres que tienen establecidas por mis antecesores».

La Unesco consideró este documento determinante para que León arrebatara a Londres, y la Basílica de San Isidoro a Westminster, el título de la Cuna del Parlamentarismo. «Aunque las primeras Cortes o asambleas parlamentarias reconocidas son las Cortes de Benavente de 1202, los Decretos de la Curia Regia de 1198 están considerados como uno de los precedentes más claros documentados sobre la evolución de esta tradición en el seno de las instituciones hispánicas medievales que desembocará en la rica tradición parlamentaria Europea», explica el Registro de la Memoria del Mundo Decreta de León de 1188.

La Unesco seleccionó cinco de los textos más relevantes para conceder el título que ostenta desde 2013. Antes se había logrado el mismo título para el Tratado de Tordesillas (2007) y las Capitulaciones de Santa Fe (2009). En 2013, junto con los Decreta de León 1188 pasan a formar parte de la Memoria del Mundo el Llibre Sindicat Remença (Sindicato de Aguas de Valencia) y los materiales relativos a la Misión Keicho a Europa (Japón a España).

Hoy se escucharán las quejas de la ciudadanía por boca de su portavoz. El guión del pleno hace un guiño al Procurador del Común, que es la única institución de la Comunidad Autónoma que tiene su sede en León. El clero mantiene su sitio: es el anfitrión. La Basílica de San Isidoro fue reconocida en el 2010 con la Medalla de Oro de las Cortes de Castilla y León, con motivo del 1100 aniversario del Reino de León.

Hoy es un día de gestos. Y de homenajes. Sonará el Himno de León al finalizar el pleno y habrá intercambio de regalos. Las Cortes entregan a la Colegiata de San Isidoro un monolito conmemorativo y el Ayuntamiento de León entregará a la presidenta Silvia Clemente un gallo de San Isidoro.

Han pasado 808 años desde la última curia de Alfonso IX, al menos de la última de las que guardan constancia los documentos. En 1208 volvió a reunir a las Cortes en León.

Fuente: Ana Gaitero , diariodeleon.es

Fotografía: Ramiro