Guardo y la montaña palentina celebró ayer las "Merendillas" bajo el agua

Guardo amaneció ayer lluvioso y con una temperatura bastante desapacible. A medida que el día iba avanzando la situación fue mejorando poco a poco, aunque los cielos encapotados y la lluvia intermitente fueron los protagonistas del Lunes de Pascua.

A pesar de la climatología adversa, las panaderías vendieron muchas más barras de lo normal y los huevos volaron de los lineales de los supermercados. Y es que la localidad norteña celebró ayer sus Merendillas, la fiesta con la que los vecinos de la localidad minera despiden su Semana Santa.

Tradición que habitualmente se desarrolla en los campos de La Peña, un paraje situado a unos cuatro kilómetros del casco urbano, y que este año los guardenses tuvieron que celebrar a resguardo de las precipitaciones en sus hogares o en locales de ocio por las inclemencias del tiempo.

Sin embargo, el cambio de hora y las vacaciones escolares animaron a unos pocos valientes -sobre todo jóvenes- a acercarse a lo largo del día hasta esta zona boscosa para degustar apetitosos bocadillos de tortilla de patata y dar un pequeño paseo.

Quienes se desplazaron hasta La Peña lo hicieron principalmente en vehículo particular, aunque también hubo montañeses que lo hicieron en bicicleta o a pie cargados con la mochila al hombro, en la que no podía faltar el chubasquero porque la lluvia hacía de las suyas cada poco tiempo.

Una vez que llegaban a su destino final, el panorama no era nada halagüeño: pistas llenas de barro con grandes socavones y praderas anegadas por el agua, lo que propició que su estancia durase bien poco. Tanto es así que en algunos momentos de la tarde, el momento álgido de la fiesta, las campas estaban completamente desiertas.

OTROS PUEBLOS. Además de en Guardo, las Merendillas también es una fecha importante para otros municipios del entorno. Destacan Velilla del Río Carrión y Santibáñez de la Peña, donde los vecinos normalmente se desplazan hasta el monte para pasar la tarde, aunque este año también tuvieron que hacerlo bajo techo.

No muy lejos de allí, en Saldaña, celebraron el Lunes de los huevos. El esquema es similar al que se sigue en la Montaña Palentina: se prepara tortilla y se comen con la familia y los amigos en el campo o en los pinares próximos a la villa. Sin embargo, y al igual que en el resto de pueblos donde esta tradición sigue viva, la lluvia, hizo que la merendola se celebrase en casa.

SEMANA SANTA. Al igual que ayer, la mitad Norte de la provincia, ha vivido una Semana Santa pasada por agua. De hecho, en Guardo se tuvieron que suspender dos de los ocho desfiles procesionales: LaBorriquilla, el Domingo de Ramos, y la Virgen de la Soledad, el Sábado Santo.

Pese a ello, la villa ha recibido cientos de visitantes durante el puente. Así lo manifiesta el alcalde, Juan Jesús Blanco, quien aseguró que ésta es «con diferencia, la época del año en la que más gente nos visita. Unos datos muy beneficiosos para los comerciantes y hosteleros de nuestra localidad, que ven cómo mejora considerablemente su volumen de ventas durante estos días».

Donde también se notó la masiva afluencia de gente fue en la piscina cubierta y el Centro Hidrotermal, que han arrojado unos excelentes datos de bañistas. «Las taquillas se completaron el Miércoles Santo, no entraba ni una sola persona más», concluyó el regidor.

Fuente: diariopalentino.es

Fotografía: Ruben Abad