El contacto con la naturaleza nos hace más humanos

Terry Hartig, profesor de psicología en la Universidad de Upsala (Suecia), ha llevado a cabo uno de los tantos estudios que han demostrado que el contacto con la naturaleza es sumamente beneficioso para los seres humanos. 

Tanto es así que después de una excursión de tan solo 40 minutos por la naturaleza se agudizan nuestras habilidades intelectuales. En este sentido dar un paseo por la ciudad o descansar en casa no conseguiría los mismos resultados y también sostiene que cuanto más natural y más aislado sea en sitio en el que paseemos, mejores serán los beneficios que recibamos.

Para los amantes de las largas caminatas por el campo y el contacto con la naturaleza, nada mejor que contar con la compañía fiel de nuestro mejor amigo, un perro, que siempre estará dispuesto a seguirnos hasta el finde mundo, que siempre estará dispuesto para dar un agradable paseo con nosotros y multiplicar los efectos saludables.

El contacto con los animales reforzará ese contacto con la naturaleza, con otras especies, y aumentará los beneficios que recibimos de ella. Pero el cuidado de una mascota, sea la que sea, es una responsabilidad que debemos asumir, y no solo disfrutar de su compañía, sino también cuidarla como se merece, con visitas regulares al veterinario, la suficiente higiene, el ejercicio que necesite y una buena alimentaciónde nuestro perro. En este sentido, en este enlace, te dejamos todo lo que debes saber sobre el pienso prensado en frío y sus beneficios, para que crezca sano y feliz, y se mantenga con la suficiente energía con el paso de los años.

Principales beneficios del contacto con la naturaleza

Como decimos, al estar en un medio natural, lejos del ruido, de la contaminación de las ciudades y del consumo desorbitado, empezamos a tomar conciencia del valor de las pequeñas cosas, que al final son las que más se disfrutan y las que realmente nos hacen sentir bien y nos dan la felicidad.

Existe una tendencia cada vez más pujante es la vida e sostenible a través de productos naturales. La vida en el campo nos ofrece esto, el contacto con la naturaleza fomenta un estilo de vida más natural. El olor del entorno nos hace sentir algo especial, esa respiración a través de las esencias del campo es en lo que se basan algunas herramientas que ayudan a la salud como la aromaterapia a través de los aceites esenciales.

Uno de los principales beneficios que nos ofrece la naturaleza es la aceptación de quienes somos, sin máscaras, sin filtros. Da igual cómo seamos, la naturaleza siempre nos recibe con los brazos abiertos, sin juzgarnos, cosa que lamentablemente no podemos decir de todos los ambientes en los que nos movemos habitualmente, especialmente en las ciudades, donde se nos juzga por nuestra apariencia física, por cómo nos comportamos, por el estatus social que tenemos, el dinero que tengamos, la casa o el coche…

En segundo lugar, y relacionado directamente con el primero, nos sentimos más libres para ser nosotros mismos.

La naturaleza es, así mismo, fuente de inspiración, alejándonos de las rutinas, del pensamiento único y sesgado, permite dar rienda suelta a la creatividad, que según diversos estudios de la universidad de Kansas se duplica.

El contacto con lo natural también nos permite tomar distancia, alejarnos de nuestras preocupaciones y los problemas toman su justa medida, sin engrandecerlos por presiones externas. En este estado, podemos reconciliarnos con nosotros mismos, y las obsesiones desaparecen.

Todos estos beneficios desembocan a un estado de conciencia más saludable, ya que el entorno natural modifica el modo en que funciona nuestra mente. Es un descanso, un paréntesis que necesitamos para restaurarnos, para librarnos del cansancio y la fatiga del trabajo diario.

Muchos psicólogos ambientales utilizan las estancias en la naturaleza para tratar la hiperactividad y la falta de concentración en los niños. En este sentido, es cada vez más importante iniciar a los niños en la convivencia con lo natural, pues han nacido en una sociedad de prisas, donde imperan las pantallas y la mayor parte del ocio que les llega es a través de ellas.

Para los niños, vivir en el campo es un ambiente ideal para crecer y desarrollarse, pero si esto no es posible, se pueden buscar formas de ocio alternativas, como por ejemplo los parques de aventuras en los árboles que podemos encontrar en los propios núcleos urbanos y que están teniendo una gran acogida, que gustan a grandes y pequeños. Y es que no debemos olvidarnos del poder curativo de los árboles y convivir con ellos o, como en este caso, jugar con ellos, nos resetea la mente y el espíritu, a grandes y a pequeños.

El entorno nos ayuda a sanar

En último lugar, queremos destacar que la causa de la mayoría de enfermedades se desconoce, que son el resultado de procesos complejos que no podemos explicar y que no solo ocurren en nuestro interior, sino que están relacionadas con nuestro entorno, pues las sustancias que ingerimos tampoco lo explican todo.

Parece ser que las teorías que tienen más aceptación en la actualidad para la explicación de lo que ocurre dentro de nosotros apuntan a que el ser humano no acaba en la piel, sino que todo el entorno y las relaciones que establecemos con él, así como con el resto de seres vivos nos afecta para bien o para mal. Estamos siendo continuamente atravesados por redes químicas y electromagnéticas y, probablemente, por otras energías que desconocemos y que no sabemos cómo nos afectan.

Debemos entender al ser humano como parte indisoluble de una red de vida y cuanto mayor sea nuestra adaptación al medio natural, mejores serán las estrategias preventivas y mayor éxito tendrán las terapias aplicadas, y, por lo tanto, mayor calidad de vida obtendremos.

Fuente: Diario de Valderrueda

Fotografía: archivos